Es medio día del último viernes del mes y, como de costumbre, entras a la sala de juntas para exponer sobre los resultados del área de producción. Comienzas tu exposición hablando acerca de los objetivos del área y los resultados que han superado toda expectativa. Retienes la atención de las personas presentes respondiendo a todas sus preguntas. Sigues con tu presentación y te percatas (por el zumbido de los celulares) que todas las personas de la sala empiezan a recibir mensajes. Súbitamente cambia la manera en que te ven tus colegas, algunos te miran con desaprobación e incluso repulsión, otros te miran con un aire burlón.
No puedes contenerte más, tomas tu celular y abres el misterioso mensaje que aparentemente todas las personas recibieron. Para tu sorpresa, eres tú quien aparece en un video quemando una impresión con el logotipo de la empresa mientras haces declaraciones negativas sobre la empresa y vinculas sin fundamentos a distintos miembros de la compañía con actividades ilegales. No puedes creer lo que ven tus ojos, tú nunca harías dichos actos o declaraciones. Empiezas a cuestionarte, ¿acaso es esto solo una pesadilla? En realidad, esto podría ser un deepfake.
El deepfake es una amenaza digital relativamente nueva, la cual sigue perfeccionándose día a día. Los inicios de este tipo de suplantación de identidad eran simples montajes fotográficos; sin ser deep, solo fake. En estos, se montaba el rostro del objetivo sobre un cuerpo ajeno o a un sujeto en un ambiente prediseñado y ¡listo! la magia estaba hecha. En la actualidad, consiste en un proceso mucho más complejo y profundo, basándose en entrenamiento de IA (Inteligencia Artificial). El programa aprende a imitar los gestos, expresiones, posturas e incluso la voz de las personas objetivo. Existe una amplia gama de calidades y finalidades para el uso de esta tecnología, algunos ejemplos son:
Recreativas: Un ejemplo son cuentas de redes sociales en las que abiertamente se menciona que es un ejercicio lúdico. Como es el perfil en Instagram de Miles Fisher, donde se hace pasar por Tom Cruise.
Políticas: Durante los primeros meses de la guerra entre Rusia y Ucrania circuló en distintos medios un video, donde se veía (aparentemente) al presidente ucraniano Volodimir Zelenski haciendo un llamado a su nación a rendirse y bajar las armas. Este video resultó ser un deepfake y rápidamente se emitió una respuesta.
Delictivas: Así como el escenario expuesto al inicio, esta variante busca comprometer la seguridad de la información e impactar en las finanzas y/o reputación de las personas y organizaciones. Las posibles consecuencias pueden ser morales, económicas, psicológicas, entre muchas otras más.
Existen distintas maneras en que puedes detectar un deepfake, como poner especial atención en la congruencia de la iluminación, movimientos del sujeto y contexto bajo el que se emite el mensaje. Metabase Q, empresa líder en ciberseguridad en América Latina, fomenta la cultura de ciberseguridad a través de entrenamientos de concientización y prevención, disponibles para toda organización sin importar su tamaño o madurez en materia de seguridad digital.
POR RAFAEL SANTANA
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