DAVOS, Suiza. Las impactantes imágenes proyectadas en el salón principal con las que abrió ayer la Reunión Anual del Foro Económico Mundial —guerra, desplazamientos humanos, fenómenos meteorológicos extremos—, fueron el prefacio para lo que los líderes empresariales, políticos y sociales escucharan un llamado de alerta por parte del fundador y presidente ejecutivo de la organización más trascendental de la globalización contemporánea. Klaus Schwab aseguró que se debe ser optimista ante la adversidad, y dijo: esta audiencia tiene el herramental y los recursos para mejorar la situación mundial, colaborando y diseñando soluciones integrales.
Pero el contexto es particularmente sombrío, sobre todo para Europa. En un discurso transmitido en vivo desde Kiev a los Alpes suizos, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, apeló a la unidad mundial para rechazar la invasión rusa en su territorio, demandando la profundización de las sanciones contra el invasor, y solicitando al mundo que se registre lo que nadie imaginaba: que Ucrania resistiría y detendría la invasión a pesar de que todos apostaban a que se rendiría en dos días.
Zelenski fue pragmático frente a los empresarios, que le aplaudieron de pie: solicitó inversión para duplicar el número de puertos ucranianos para tener infraestructura suficiente, y conminó a los gobiernos a vigilar que no estén comprando granos ucranianos extraídos por los rusos como contrabando a partir de la ocupación territorial. Es responsabilidad de todos los gobiernos del mundo, además, confiscar los activos rusos en el exterior, y crear un fondo de dinero dirigido a ayudar a la población ucraniana que ha quedado vejada por la guerra.
Y este año Davos fue más allá. En lo que antes conocíamos como la “Casa de Rusia” ahora se ha sobrepuesto una etiqueta notoria que la rebautiza como “La Casa de los Crímenes de Guerra de Rusia”. Está en plena Ave. Promenade, a la vista de todos los asistentes del Foro. En adición, decenas de parlamentarios y alcaldes de ciudades ucranianas viajaron desde su país aquí, para relatar de viva voz lo que están sufriendo.
Afortunadamente, a pesar de la guerra, hay esperanza, y el Foro tiene gran capacidad de convocatoria para lanzar iniciativas globales que cambiarán los espacios de debate.
Ayer lanzó la Villa Virtual de Colaboración Global, en alianza con Microsoft y con Accenture, un metaverso que será construido durante los siguientes meses y años con objeto de proveer un espacio único, inmersivo, incluyente e interactivo, que permitirá a empresas, gobiernos y organizaciones de la sociedad civil diseñar soluciones para los problemas globales. Brillante.
EBRARD
El canciller Marcelo Ebrard dijo inicialmente que sí vendría a Davos, pero canceló, según relatan mexicanos que escucharon esa versión en el Foro.
POR CARLOS MOTA
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