COLUMNA INVITADA

Política prehistórica y cambio climático

Querido lector ¿Conoce usted la posición de Andrés Manuel López Obrador y los aspirantes a sucederlo, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, sobre cambio climático?

OPINIÓN

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Martha Gutiérrez / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Querido lector ¿Conoce usted la posición de Andrés Manuel López Obrador y los aspirantes a sucederlo, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard, sobre cambio climático?

Abro un pequeño paréntesis para advertir la relación con Alemania, país que este fin de semana va a elecciones para decidir quién será el sucesor de Ángela Merkel y la recomposición política de aquella nación. Es de relevancia porque los conservadores a través de la alianza CDU/CSU y los centro-izquierda SPD básicamente se encuentran empatados en la competencia. Uno de los puntos en dónde más se ha concentrado el debate es en la visión sobre medio ambiente y movilidad que presentará el nuevo gobierno a los alemanes.

Evidentemente, estos debates son demasiado sofisticados en comparación a los temas que discutimos en México si ponemos como ejemplo lo último en la agenda política de las mañaneras y los tweets intentando evidenciar a un personaje menor que llamó a la esposa del Presidente de la República "zopilota".

Más allá de esta lamentable perspectiva, en lo importante el debate sobre el medio ambiente es crucial para el mundo y sobre todo bajo una meta determinada: para el año 2050 la emisión de carbono debe ser cerca de 0.

Los partidos políticos en Alemania presentan objetivos claros con algunas profundas diferencias en la implementación, en los cuales algunos pretenden reducir las emisiones 65% para el 2030, y 88% para 2040. Para lograr esa meta la propuesta es la construcción de instalaciones de viento y solares, que incluye la simplificación de leyes de planeación, e incrementar la biomasa, energía geotérmica, y energía hidráulica en áreas rurales.

Sobre todo, pretenden que a través de la Unión Europea se establezcan reglas claras, con la intención de crear un sistema mundial (global). Otros en distintos porcentajes se adelantan en tiempo sobre el cumplimiento de 0 emisiones de carbono y proponen prohibir la venta de automóviles contaminantes a partir de 2030, y asegurar que 15 de los 38 millones sean eléctricos, además de la introducción de un impuesto para los vehículos de carga que produzcan CO2.

En lo macro, proponen la inversión de 100 billones de euros para trenes, en ciudades circulación máxima de 30 km por hora y 130 km por hora en carreteras. Promueven para el 2030 el uso del tren y la sustitución de aviones para viajes cortos, y electrificar el tren cuando menos al 75% de la red.

Mientras todo eso se discute, acá en nuestro país los flamantes gobernantes apuestan justo por lo contrario, y en la realidad sitúan a México en un gravísimo riesgo, porque lo que no hagamos hoy, no podrá ser alcanzado justo cuándo la apuesta a largo plazo es esa, o de plano será muy complejo y con costos económicos y en la calidad de vida de nuestros hijos, muy alto.

López Obrador, a través de la señora Nahle, el agrónomo Romero, y ahora el hyper defensor internacional Ebrard apuestan por el "fortalecimiento" de Pemex quien fuese alguna vez gallina de los huevos de oro para que utilice como fuente trascendental de venta el combustóleo, uno de los hidrocarburos más contaminantes y generadores de CO2, para ello construyen refinerías absurdas a cualquier lógica, e insisten en violar los acuerdos internacionales en materia de energía, a pesar del reclamo abierto de las compañías y gobiernos internacionales.

Por otra parte, en un doble discurso el canciller Marcelo Ebrard, con tal de que Andrés Manuel le dé una oportunidad se ridiculiza en la ONU con temas sobre Cuba, vacunación y migración, mientras que la Jefa de Gobierno recorre la Ciudad de México acompañada de López Obrador para promover su precandidatura. La apuesta de ella es la construcción de más segundos pisos, y lo más que llega en materia medioambiental es seguir al Presidente hasta dónde el quiera.

¿Con esos candidatos y amigos, para que queremos enemigos?

Definitivamente lo que ocurre en Alemania es muy distinto a lo que tenemos aquí y lo afirmo porque más allá de partidos políticos, de continuar enfrascados en la discusión, compartiendo memes y abriendo los espacios en los medios a las irrelevantes ocurrencias mañaneras, la falta de visión y de proyecto de este gobierno, sin entrar de lleno a los temas importantes y de trascendencia como la movilidad y cambio climático, los mexicanos como sociedad y país lo vamos a pagar muy caro.

Y no es pregunta.

POR MARTHA GUTIÉRREZ
ANALISTA EN COMUNICACIÓN POLÍTICA
@MARTHAGTZ

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