A FUEGO LENTO

La reforma laboral que no llega

Crecen los conflictos y lejos está de materializarse la nueva política laboral en México: outsourcing y democracia sindical, entre los pendientes

OPINIÓN

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Alfredo González / A Fuego Lento / El Heraldo de México Créditos: Foto: Especial

Desastrosa, por decir lo menos, ha resultado la estrategia para implementar la nueva reforma laboral en México. 

La eliminación del outsourcing, la democracia sindical y la legitimación (validación) de los contratos colectivos, en empresas públicas y privadas están muy lejos de materializarse.

A pesar de que son tres elementos fundamentales para dar un giro en la política laboral, poco se ha hecho. Por el contrario, cada vez se acumulan los problemas. 

Un caso emblemático: el proceso para legitimar el contrato colectivo de la planta de General Motors, en Guanajuato

La mano negra del gobierno y de personajes cercanos a la 4T derivó en un conflicto con Estados Unidos, mismo que amenaza con escalar a instancias internacionales por el mal manejo de la Secretaría del Trabajo

Pero eso no es todo. Surgieron acusaciones graves a dos semanas de que se realice, por segunda ocasión, la elección interna para ratificar el contrato colectivo en la planta armadora de Silao. Acusan a la dependencia que encabeza Luisa María Alcalde de enviar a un inspector con antecedentes penales y que es señalado por trabajadores de amenazarlos para que voten por la “no ratificación” del contrato, cuya titularidad pertenece al sindicato cetemista Miguel Trujillo López

Se trata de Luis Armando Núñez Pizano, alias El Güero, quien aparece en la nómina de la STPS con el puesto de “Inspector calificado”, con un sueldo bruto mensual de 17 mil 10 pesos, y un sueldo neto estimado de 13 mil 608. 

Sin embargo, fue arrestado en Colima el 2 de abril de 2020, por posesión de arma corta abastecida y varios cartuchos, 450 mil pesos en efectivo y un vehículo sin placas.

De acuerdo con las bases de datos de la STPS, también ha sido utilizado para intimidar a las empresas, mediante inspecciones injustificadas, como ocurrió con varias firmas, entre ellas, Alimentos finos de Occidente, S.A. DE C.V., Unilever Mexicana, S. de RL de C.V.  y Grufune, S.A. de C.V. en 2015. 

Sobre el caso de General Motors, los trabajadores y la empresa lo ubican como uno de los responsables de haber reventado (el 21 de abril) el procedimiento de legitimación del contrato colectivo de trabajo de GM. 

Eso derivó en la suspensión del mismo y en una de las primeras quejas internacionales en el marco del Mecanismo de respuesta rápida del T-MEC.  Hoy, ese conflicto está como al principio: sin visos de solución y con el riesgo de que la sangre llegue al río.  Además, de escalar a otro nivel, pone en peligro la fuente de empleo de cientos de trabajadores de la empresa norteamericana, pero también el de unos 10 mil empleos de la industria automotriz por el mal manejo que ha hecho de un conflicto laboral la Secretaría del Trabajo. 

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Y como dice el filósofo… Nomeacuerdo: “El argumento de la intimidación es una confesión de impotencia intelectual”.

POR ALFREDO GONZÁLEZ CASTRO
ALFREDO.GONZALEZ@ELHERALDODEMEXICO.COM
@ALFREDOLEZ

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