COLUMNA INVITADA

¿En serio son remesas?

Banxico reporta cantidades estratosféricas, pero ante un análisis más detallado, son cifras inverosímiles

OPINIÓN

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Jorge Andrés Castañeda / Colaborador / Opinión El Heraldo de México Créditos: Especial

Se ha repetido hasta el cansancio que las remesas han salvado a los hogares mexicanos en los últimos dos años ante el fracaso de la política social y la crisis económica pandémica. Banxico reporta cada mes cifras estratosféricas que son un récord de entrada de remesas. Pero ante un análisis un poco más detallado es una cifra inverosímil.

Durante el 2020, Banxico reportó que ingresaron al país 40,606 millones de dólares (mdd), una cifra que este año será aún mayor. En términos absolutos el estado que más recibió fue Jalisco con 4,153 mdd y el segundo Michoacán con 4,055 mdd. Al mismo tiempo, según el Censo realizado el año pasado, de los 35.2 millones de hogares mexicanos, 1.77 millones declararon recibir dinero del extranjero, el 5% del total (la ENIGH reporta 1.56 millones, el 4.4% del total).

Si uno toma como buenas ambas fuentes implicaría que los hogares receptores de remesas son parte de los más ricos del país. Viéndolo a nivel nacional, el hogar promedio receptor de remesas habría recibido 23 mil dólares durante el 2020, equivalentes a 38 mil pesos al mes colocándolos en el 5% de mayor ingreso. Los datos estatales son aún más dramáticos. Un hogar receptor de remesas en Michoacán estaría en el 2% más rico del estado, en Guanajuato en el 3% y en Oaxaca en el 1%. Y a nivel municipal, hay datos aún más extraños como los 442 millones de dólares recibidos en 2020 por la alcaldía Álvaro Obregón cuando solo 4,175 hogares reportaron recibir dinero del extranjero. Esto equivaldría a más de 100 mil dólares al año por hogar.

O muchos más hogares reciben remesas o una parte importante de ese dinero no son remesas. Una posible explicación es que el número de hogares que recibe remesas está subreportado. Pero el hecho de que la cifra del Censo y de la ENIGH sean tan similares hace esta explicación dudosa. E incluso, concediendo que fueran el doble de hogares los que reciben remesas, seguirían estando en el 10% más rico del país.

¿Qué es lo qué está sucediendo? Algunos afirman que se trata de dinero del crimen organizado. En el libro Dreamland, Sam Quiñones documentó como un cartel nayarita usaba las remesas para repatriar ganancias. Y el año pasado, Jesús Lemus publicó un reportaje donde afirma que la DEA está al tanto de esto.

Como el monto que reporta Banxico es la suma de las transferencias entre personas físicas a través de instituciones bancarias incluida en la balanza de pagos, incluye sin duda los envíos de dinero de los paisanos a sus familias y probablemente algo de crimen organizado, pero seguramente hay mucho más.

Existen innumerables negocios informales que participan en el comercio exterior cuyos ingresos, por esta metodología, son contados como remesas. O incluso, transferencias entre una misma persona con cuentas en ambos lados.

Sin duda esta es un área de estudio que se debe explorar mucho más y la explicación corresponde a diversos fenómenos. Pero las cifras estratosféricas reportadas cada mes simplemente no cuadran. Antes que festejarlas habría que entenderlas mejor.

POR JORGE ANDRÉS CASTAÑEDA
COLABORADOR
@JORGEACAS

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