SILBATAZO INICIAL

Rebeldía...

Aplaudo y reverencio a los jóvenes que en México se pasan por el arco del triunfo a los técnicos de la vieja escuela y a los dirigentes que pretenden frenar su desarrollo temprano

OPINIÓN

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José Eduardo Iga / Silbatazo inicial / Opinión El Heraldo de México

El futbol no es física nuclear o una ciencia exacta, aunque muchos lo quieran pintar de esa manera con análisis realmente exhaustivos. La fórmula del fracaso o éxito está probada. En el balompié azteca, como en la vida, sobre todo en nuestro país, nos empecinamos a lo que no funciona en muchas ocasiones, y que en territorios desarrollados llevan años implementando.

Pudiésemos copiar sus ejemplos y, no obstante, preferimos quedarnos en lo arcaico y creyendo que ostentamos la razón. Si lo ejemplificamos en el futbol, los equipos cometen los mismos fallos.

Se debutan jóvenes incluso después de los 20 años, para que cuando alguno quiera dar el salto a Europa, pronto los técnicos digan que aún no están listos, que llevan un proceso y demás cursilerías baratas, cuando los mejores jugadores de la historia han debutado muy jóvenes, y de una vez por todas los codean en la élite, para que a los 20 o 21 ya sean titulares indiscutibles de algún grande.

Kylian Mbappé. Desde hace rato en los máximos reflectores, tiene 22 años en la actualidad y debutó a los 16. A su edad, muchos en México dirían que no está listo para estar en un equipo grande. Allá se lo disputan los cuadros con más recursos económicos
para que sea referente en la inmediatez.

Erling Haaland. Apareció en Primera División a la edad de 15 años. A los 18, ya la estaba rompiendo en la Champions, y a los 20 ya ostenta varios récords pulverizados. Ah, pero en México, a los 22 o 23 no están listos.

Pelé. Destacando desde que tenía 16 primaveras, y antes de los 18 ya era campeón de una Copa del Mundo.

Maradona, igual que el astro brasileño. Pudo haber aparecido a los 15, pero fue a los 16, recién cumplidos, cuando la máxima categoría argentina le vio nacer.

Aplaudo y reverencio a los jóvenes que en México se pasan por el arco del triunfo a los técnicos de la vieja escuela y a los dirigentes que pretenden frenar su desarrollo temprano.

José Juan Macías tuvo una temporada deleznable con las Chivas, y pese a que se debió ir en otras circunstancias, con un elevado nivel futbolístico, desde que estaba en León hacía todo lo posible por irse a Europa y mostraba una mentalidad de liderazgo. En cierta manera, se rebeló.

Jesús Manuel Corona quería ser retenido en Rayados; todos conocemos la disputa con Víctor Manuel Vucetich y, sin embargo, se fue a probar suerte desde temprano.

Diego Lainez, el claro ejemplo de lo que se debe hacer. A los 18 ya se había ido a Europa, con la desaprobación del argot mexicano. Comió dos años banca y, como era de esperarse, salió Miguel Herrera a decir, con dosis de oportunismo, que no estaba listo.

Sin embargo, todavía a los 21 tiene toda una trayectoria y con un par de buenas temporadas algún cuadro interesante se podría fijar en él.

Enhorabuena por Macías, y los mejores deseos para el canterano rojiblanco. Que la rompa en su nueva aventura y que sigan emergiendo jugadores rebeldes al sistema, siempre y cuándo busquen su desarrollo personal.

POR JOSÉ EDUARDO IGA 

TITULAR DE ARREBATO DEPORTIVO EN EL HERALDO RADIO TORREÓN 

TWITTER: @JOSE_IGA

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