PERMANENCIA VOLUNTARIA

El arte de envejecer sin gracia

Después de un tiempo de no haber protagonizado películas en Hollywood, Gael García Bernal vuelve al ruedo con la cinta Viejos bajo la dirección de M. Night Shyamalan, creador de El Sexto Sentido

OPINIÓN

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Permanencia Voluntaria.Linet Puente / Permanencia Voluntaria / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

“Veo gente muerta” Es quizá una de las frases más populares e icónicas en la historia del cine, quizá tan solo después de “Yo soy tu padre” y “Hasta la vista baby” (probablemente cada quien tendrá una en la mente pero yo recordé esas). Estas palabras salieron de la cabecita del cineasta norteamericano M. Night Shyamalan quien con un estilo único creó El Sexto Sentido, que a mi parecer es una de las películas más importantes del género de suspenso. Después de la exitosa cinta que obtuvo 6 nominaciones al Oscar, incluidas la de mejor director y guionista para Shyamalan, vinieron otros buenos momentos para él con filmes como El Protegido y Señales, con las que estableció su particular forma de contar historias siempre con un giro de tuerca al final, pero también vinieron malas experiencias para el director con películas como La Aldea, La Dama en el Agua, El fin de los Tiempos, entre otras. Creo que he entrevistado a M. Night Shyamalan por muchas de sus cintas y es un hombre brillante, quien por cierto siempre tiene cameos y/o participaciones en sus películas. 

La cinta Viejos (Old) bien podría ser la peor pesadilla para las empresas que han invertido fortunas en crear productos que retrasan los efectos del envejecimiento, pues supone una isla en la que las personas que la habitan envejecen rápidamente sin explicación alguna. La verdad es que el argumento de la película es de lo mejor que he visto en mucho tiempo, aunque a mi parecer la cinta llega a ser un tanto asfixiante (no sé si esto sea bueno o malo, o si esa era la intención del cineasta). Eso o yo estaba pasando por un momento sumamente escalofriante con mi hijo enfermo en casa. Y es que también hay que decirlo, para quien no conozca el trabajo de M. Night Shyamalan, su forma de contar historias se ha vuelto muy peculiar pues el tono de los filmes tiende a ser un tanto extraño e incómodo, como lo mostró en el filme Los huéspedes (The Visit) e incluso en la serie Servant, la cual fue fabulosa en la primera temporada, un tanto extraña en la segunda y ahora ya va por la tercera entrega.

Desde que hizo La Aldea, he tenido la oportunidad de platicar con M. Night Shyamalan casi por todos sus proyectos filmográficos subsecuentes y digamos que de cierta forma he sido testigo del crecimiento del director, lo cual agradezco profundamente. Sobre todo cuando se trata de seguir de cerca la carrera de un cineasta que sabe cómo filmar un género que a mi me encanta. Puede gustarte o no lo que hace, pero nadie puede dudar nunca que Shyamalan tiene un sentido único. Eso es un poco lo que me sucedió con esta cinta, que a pesar de que ha recibido muy buenas críticas y elogios entre la prensa norteamericana, a mi me costó mucho trabajo entrar en el modo de la misma, además de que me pareció un tanto deslactosada light la actuación de Gael García Bernal, con quien por cierto pude platicar y debatir sobre lo que representa el tiempo en nuestras vidas: “Esta película en efecto hay una relación muy fuerte con lo que estamos viviendo también, porque la pandemia, a la humanidad entera nos ha cambiado la percepción del tiempo, cambiaron muchas cosas, pasaron desde tragedias muy fuertes y cosas muy bellas que la pandemia trajo también… entonces trasladado esto a la experiencia de hacer esta película, en el momento en el que la hicimos, también que fue a mediados del 2020, había una incertidumbre total y representó una bocanada de aire fresco lanzarnos a hacer esta película, era estar aislados con un grupo de personas, protegidos del afuera del alguna forma, descalzos, sin tapabocas, durante tres meses”.

Si eres fan del género de suspenso, es una parada obligada en el cine, porque yo soy de la idea que todas las películas se tienen que ver para tener una perspectiva más real sobre lo que es bueno y lo que no.