COLUMNA INVITADA

El camino hacia la recuperación: el G20 en 2021

El año pasado, el G20 acordó respuestas inmediatas para evitar una mayor profundización de la crisis y trazar la ruta para superarla

OPINIÓN

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Diego Domínguez Cardona/ Colaborador/ Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

De manera virtual, en enero inició el nuevo ciclo del G20. Italia, quien ejerce la presidencia en 2021, ha convocado a los 20 miembros, países invitados y organismos internacionales a dialogar sobre los diversos temas que componen la agenda del grupo. La pandemia y sus múltiples efectos están en el centro de las discusiones.

El año pasado, el G20 acordó respuestas inmediatas para evitar una mayor profundización de la crisis y trazar la ruta para superarla. Los desafíos este año son quizá más complejos. Con la aplicación de las primeras vacunas, las principales economías del mundo tienen la triple tarea de impulsar una inmunización amplia, promover una recuperación incluyente y sostenible, y continuar atendiendo otros retos que trascienden la coyuntura, como las desigualdades y el cambio climático. 

El G20 debe seguir ejerciendo un liderazgo fuerte y responsable, mediante consensos que den la dirección política necesaria sobre el camino a seguir. Para lograrlo, Italia enfocará el trabajo del grupo en tres ejes interconectados.

En el primero, la tarea es diseñar políticas que prioricen el bienestar de las personas. La pandemia puede ser una oportunidad para configurar nuevos paradigmas basados en un desarrollo más inclusivo, en el que se garantice el acceso universal a la salud, la educación y los empleos de calidad. Asimismo, el componente social debe estar presente también en el ámbito económico. Ello significa estimular el comercio, fortalecer las cadenas de producción y reactivar sectores estratégicos, como el turismo. Será importante avanzar hacia un tratamiento más sostenible de la deuda de los países de menor ingreso, así como extender apoyos a los Estados de renta media.

En cuanto al segundo eje, la crisis ha subrayado la urgencia de elevar el nivel de ambición, para asegurar la sustentabilidad de nuestra presencia en el planeta. Italia presidirá junto con Reino Unido la COP26 de cambio climático, en la cual será fundamental asumir compromisos para acelerar la implementación del Acuerdo de París. Debemos también actuar con mayor determinación para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pues nos acercamos a la fecha límite de su cumplimiento.

Finalmente, el tercer eje se enfocará en delinear un futuro más próspero. La nueva realidad estará marcada por una mayor utilización de las tecnologías en todos los aspectos de la vida cotidiana. La digitalización sólo será efectiva si todas las personas se benefician de ella. Por ello, el G20 dirigirá sus acciones a garantizar la conectividad universal, reducir las brechas tecnológicas y asegurar un ambiente virtual abierto, seguro y confiable.

Las mujeres y niñas se han visto particularmente afectadas por la crisis, por lo que la equidad de género seguirá siendo una prioridad transversal. Se pondrá énfasis en el acceso equitativo a la educación y en aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral, incluidos los puestos de liderazgo.

México participará activamente en estos ejes. Fomentaremos acuerdos a nivel global que se traduzcan en acciones concretas en el ámbito local. El multilateralismo es más efectivo cuando tiene un impacto directo en las sociedades. A lo largo del año, presentaremos iniciativas puntuales y buscaremos acercar posiciones. Además, continuaremos el diálogo con la sociedad civil y el sector privado para conocer sus perspectivas e integrar una posición nacional sólida. Contribuiremos a mantener la eficacia, la actualidad y la relevancia del G20, tanto en el contexto actual, como hacia el futuro.

 

POR DIEGO DOMÍNGUEZ CARDONA
DIRECTOR PARA G20 Y MIKTA, SRE
@DIEGODOMINGUEZC

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