LA ENCERRONA

El mundo de Galileo y el político

Esta pandemia nos recordó que la globalización no es solamente política y económica, también es un asunto de salud que afecta a todas las personas

OPINIÓN

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Adriana Sarur / La Encerrona / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

En cuanto termine este día, la vuelta al sol de este 2021 también llegará a su fin, para dar comienzo a un nuevo año. Este que concluye nos mostró que hay esperanza, pero también que debemos de permanecer unidos para volver a estar juntos. Otra enseñanza que nos deja es que las actividades de los individuos, así como las de la sociedad ya no pueden ser paralizadas y tenemos que seguir adelante con nuestras vidas. Asimismo, esta pandemia nos recordó que la globalización no es solamente política y económica, también es un asunto de salud, lo que sucede en China, India o Sudáfrica afecta a todas las personas que habitamos este mundo.

En este sentido, hemos podido observar que la variante actual de COVID-19, “Ómicron”, ha resultado la más contagiosa, pero de menor gravedad que las anteriores. Vemos a decenas de atletas, políticos, empresarios, trabajadores que dan positivo a este virus, pero en esta ocasión ninguna de sus actividades se detendrán. Tomaré como botón de muestra el ámbito político-electoral que se dará en 2022 alrededor del mundo, y con la premisa de la conexión global sin dejar de lado las propias dinámicas y características locales, nacionales y regionales, puesto que el mundo político gira más rápido que el de Galileo.

En África y Oriente Medio se llevarán a cabo comicios electorales en Túnez (legislativos), Kenia (presidenciales), Libia y Líbano (ambos parlamentarios), dentro del marco del conflicto interno, ya sea bélico, político, social o geopolítico. En Asia, las elecciones presidenciales serán en Corea del Sur y Filipinas, en ambas naciones el presidente actual no se presentará para la reelección; sin embargo dejan a sus “delfines” preparados para sucederlos en medio de conflictos de corrupción y en el entramado de fijar posición entre China y Estados Unidos, potencias que luchan por consolidar su hegemonía. Por su parte, Australia sostendrá elecciones federales entre los conservadores y laboristas con propuestas muy similares, contener a China y contrarrestar los efectos del cambio climático.

En el continente europeo la atención se centra en el regreso de la ultraderecha y el debate de la permanencia y relevancia de la Unión Europea en una era post Merkel. Las presidenciales en Francia son una muestra de ello, el arribo del ultraconservador Zemmour, aunado a Le Pen y a Pécresse, con sus discursos nacionalistas y xenofóbicos pone en riesgo la continuidad de Macron. Algo similar pasa en Portugal, país que tendrá elecciones parlamentarias y donde el partido del socialista Antonio Costa puede perder posiciones ante la derecha representada por Chega. En Hungría todo indica que seguirá favorecido el partido del primer ministro Viktor Orbán, tras 10 años en el cargo y este seguirá con sus intenciones de dinamitar a la UE.

En nuestra latitud, Joe Biden se juega la mayoría del Congreso en las elecciones de medio término, donde aún quedan vestigios del trumpismo en el seno del partido Republicano, y con unos demócratas que aún no encuentran la brújula en medio de esta pandemia. En la parte sur del continente, Colombia y Brasil eligen presidente, pero sobre todo, se decidirá si el giro a la izquierda en la región dará seguimiento a lo comenzado en Chile, con Gustavo Petro y el regreso de Lula Da Silva, respectivamente. De igual manera, Morena y López Obrador podrán refrendar su fuerza al interior del país en las elecciones de seis gubernaturas, donde las encuestas indican que ganará cinco de estas, para así conseguir más de 20 gobiernos morenistas de cara a las presidenciales de 2024, además de la famosa revocación de mandato.

La vida sigue, el mundo continúa girando y la arena política no cesa. Por mi parte les deseo un año lleno de éxitos, paz y felicidad.

POR ADRIANA SARUR
ADRIANASARUR@HOTMAIL.COM
@ASARUR

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