Lo que le sucedió a Alec Baldwin en el set de filmación de película Rust, es trágico y verdaderamente grave.
Tanto que está por llevarse a la mesa del Senado estadounidense una iniciativa de ley impulsada por el demócrata Dave Cortese, en California, movido por los abusos y violaciones de seguridad en los rodajes que dan lugar a situaciones de riesgo.
Su intención es lograr que legalmente estén prohibidas las balas y armas reales en los sets de filmación en todo el estado.
De acuerdo a Ashley Crandell, quien lleva años trabajando como responsable armero en los sets de filmación, en las grandes producciones todas las armas reales deben tener una copia en caucho para escenas en donde el arma no ocupa protagonismo en el encuadre. Al parecer, en el rodaje de Rust no había ningún solo modelo de caucho, solo había 3 armas presentes el día del fatídico accidente y todas eran reales.
El armero en el set, además, verifica la recámara y adiestra al talento para saber operarla. Añade que a los actores les gusta sentir el peso de un arma real, especialmente a los de la vieja escuela, porque creen que le da realismo a su interpretación.
En España no, pero todos los días en los sets de Hollywood hay armas de fuego reales. En otros países como Argentina o México son usadas igualmente. Pero también es verdad que no todos los días hay muertos.
Entonces, ¿qué pudo haber pasado para que Alec Baldwin disparara accidentalmente y le quitara la vida a la directora de fotografía y dejara herido al director?
El incidente ocurrió durante un ensayo en el que Baldwin tenía que desenfundar el arma en cruzada y apuntarla directo hacia el lente de la cámara. Allí se le dispara.
Fuentes allegadas a la producción revelaron a TMZ que esa misma pistola se había usado antes para prácticas de puntería, -con balas reales- registradas a unas millas del Rancho Bonanza Creek en donde se rodaba el filme, y que algunos miembros del equipo habían participado en ellas. Quizá una de esas balas pudo haberse quedado en la recámara ese día.
Tentativamente cuando la policía llegó a la escena del crimen encontró las balas reales y las de salva en el mismo almacén. La encargada de todo esto es Hannah Gutierrez Reed una joven de 24 años a quien el staff calificó de verde e inexperta.
Pero es Dave Halls, asistente de dirección, el directo responsable de haber entregado el arma a Baldwin y quien tiene un sinfín de quejas por saltarse los protocolos de seguridad durante este rodaje y otros anteriores.
El problema real para Baldwin es que no solo es el protagonista, sino el productor ejecutivo de la película. La repercusión de ello puede resultar en cargos de homicidio imprudencial con una pena de hasta 18 meses en prisión. La libertad puede recuperarla, pero la paz mental ¿quién se la devuelve?
POR ATALA SARMIENTO
COLUMNAS.ESCENA@HERALDODEMEXICO.COM.MX
@ATASARMI
CAR