COLUMNA INVITADA

Y cuando salió de palacio, la realidad seguía ahí

De acuerdo con estimaciones del Gobierno de México el envió de las remesas se elevó en 11.3% durante 2020

OPINIÓN

·
Óscar Sandoval / Columna invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

El arte de la comunicación gubernamental cambia destinos de países porque es lo que permite, bajo la bandera discursiva de la democracia y la transparencia, hacer cambios profundos en las estructuras institucionales y legales. 

Además, una buena estrategia condesciende en que lo que en una administración o sexenio considera blanco, en otra puede ser negro. También que un político en campaña tenga una postura y como gobernante otra.

La clave esta en mantener la posición a pesar de que vaya en contra de la responsabilidad conferida en la Constitución y las leyes que de ella emanan, y que esto, lejos de afectar en la popularidad, la fortalezca.

Las remesas siempre han sido una preocupación del presidente López Obrador.

En septiembre de 2008 ante la crisis hipotecaria en Estados Unidos, expresó en Los Ángeles, California que “estamos hablando de una caída histórica en las bolsas de Estados Unidos, México y un importante número de naciones, que va a traer graves consecuencias, como menos crédito, menos remesas, menos entrada de divisas por concepto de turismo y menor crecimiento económico en nuestro País".

Preocupación legítima para resolver los retos de ingreso de las familias mexicanas en el corto plazo, pero irresponsable y hasta cierto punto irrespetuoso, en específico con quienes han optado por irse “de mojados” a Estados Unidos solamente por motivos económicos.

Honor a quien honor merece. Sin lugar a duda los paisanos que han elevado, de acuerdo con estimaciones del Gobierno de México, en 11.3% el envío de remesas durante 2020, merecen el reconocimiento de la solidaridad con sus familias.

Evitemos asumir que el apoyo a un familiar implica un apoyo al presidente de México, se apellide Calderón, Peña Nieto o López Obrador. Esa silla se ocupa para resolver los retos de México, no aprovechar circunstancias adversas para las familias.

Hace bien el Presidente en reconocerlos como héroes por una sencilla razón que el mismo señala: han salvado el consumo. La ecuación se rompe en el momento en el que no viene acompañado de acciones o por lo menos planes, para evitar que las remesas sean uno de los pilares económicos de México, y dar oportunidades para que los paisanos tengan la opción de regresar a su casa.

Esto va más allá de quien nos gobierna decisión de la mayoría del voto popular. El reto esta en que en México seguimos decidiendo entre lo que esta bien o mal en función de un momento de la historia o coyuntura, no basados en que las decisiones tienen consecuencias.

Hoy es fácil decir, a pesar de que los números dicen otra cosa, que no hay funcionario en el mundo como Hugo López Gatell porque estamos opinando en función de si está bien o mal que tome vacaciones o si un médico oftalmólogo debió o no ponerse una de las primeras dosis de la vacuna en México. 

Lo trascendente está las consecuencias de las decisiones de quien es responsable de administrar la pandemia y las políticas que se definen para poner la vacuna.

Hoy los números hablan por si solos, la perspectiva histórica nos dirá si fueron correctas o incorrectas; en lo inmediato, que a juzgar por sus dichos, es lo que más le importa al Presidente, es irrespetuoso e indiferente con quienes han perdido un familiar, muchas veces en camino al hospital.

POR ÓSCAR SANDOVAL
CONSULTOR, SOCIO DE 27 PIVOT
OSANDOVALSAENZ@27PIVOT.COM
@OSANDOVALSAENZ