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Aburguesados

OPINIÓN

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En Tigres, la mezquindad raya en lo obsceno. Por más que se escondan sus defectos de forma y fondo, los resultados no le mienten a nadie. No a su poderosa y acaudalada directiva, menos a su sempiterno, gruñón y soliviantado técnico. De la burguesía que lidera en la cancha,nos ocupamos más adelante.

Los Tigres de la U, el pobre equipo rico que todo lo tiene, menos estamina y corazón. Un cuadro burgués que come caliente, tres veces al día, pero sin hambre de nada, y que pregona el anquilosado y eterno discurso fallido de quien le tira a ser de élite, en un medio donde sólo hay dos equipos que ostentan grandeza nacional: América y Guadalajara. Tigres, por increíble que parezca, con una nómina más generosa que los antes mencionados.

¿Será cuestión de modas? El futbol mexicano es así, proclive en todo momento a exagerar con términos como: “equipo de la década” y comiéndose el cuentito burdo de que Ricardo Ferretti es el mejor técnico del universo, sólo porque nunca ha sido despedido de un equipo. Y yo les digo, puesn… ¿Qué no va siendo hora? El speech del bigotudo brasileño caducó hace tiempo. ¿Que ha sido un técnico exitoso? Sin duda. Al menos ha sabido aprovechar las sutiles bondades de una liga que tiene como estandarte la benevolencia sobre todos sus demás “valores”.

Vamos a la estadística. Con una nómina exageradamente inflada, Tigres es el equipo que promedia una mayor edad de entre todos los que compiten: 32 años, la media. Muchos jugadores de condiciones ofensivas como Edu Vargas, Quiñones, Aquino, Fernández, etc., pero sólo uno que mete goles: Gignac.

Tiene muy probablemente al mejor volante de recuperación que milita en la liga, bajo la figura de Guido Pizarro, pero el argentino parece estar muy, muy alejado de su mejor versión. Con Hugo Ayala en la banca y Diego Reyes en la cancha, el desastre se potencia. ¿De dónde habrá sacado tanto crédito el joven surgido del nido de Coapa? Su caso es increíble. A sus 27 años ya jugó un Mundial (Brasil 2014) y en el América (donde se formó y debutó), el Porto, la Real Sociedad, el Espanyol, el Fenerbahçe, el Leganés y, ahora, como premio a sus múltiples y muy puntuales errores desperdigados grácilmente por todas las canchas de Portugal, España y Turquía, juega para los Tigres de la UANL. No hay partido en el que uno no quiera sacarse los ojos, tras observar sus pifias. Pienso que él mismo todavía no decide si quiere ser central, lateral o incluso medio de contención. Y ni falta que lo descubra. De cualquier forma equivocará los perfiles y continuará sumergido en su marasmo de errores, mientras sus respectivos técnicos continuarán dándole el espaldarazo. Caray. La importancia de tener un buen promotor.

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Parece que el Cerro de la Silla tiene “copete” y a los felinos se les viene la noche. Hasta la Jornada 8 se ubicaban en la decimoprimera posición con solamente 10 puntos conseguidos. Magra cosecha para quien aspira a codearse con los grandes. Aprovechando que su ultra rival rayado no se come a nadie, ahí va el tigre, nadando de a muertito, sobreviviendo en la medianía de un torneo mediocre por antonomasia.  Y dispuesto, seguramente, a aprovechar lo laxo que se ha vuelto el futbol nacional, donde se admiten hasta 12 equipos en la Fiesta Grande, vía un repechaje que sólo expone lo rancia que se ha vuelto la “clase política del futbol”, con todo y sus cochupos y maromas; sus estrategias turbias y sus arreglos en lo oscurito; sus transas y malas praxis. Y no. No estoy hablando de política, por increíble que parezca. Estoy hablando de futbol.

Qué pena, pero el balompié mexicano cada vez se hunde más en el fango, permitiendo que equipos de la aristocracia, como Tigres, se aprovechen de su endeble estructura.

Mientras tanto (y en cosas que a nadie le importan), el Atlante regresó a la casa de la que nunca debió haber salido, pero sólo para perder 0-1 contra la U de G en ese bodrio de torneo que algunos pomposamente llaman Liga de Expansión... ¿o era de desarrollo? Da igual.

POR JORGE MURRIETA
@joratla
lctl