El Instituto Nacional de Antropologia e Historia lleva por ley, desde los lamentables y fatales hechos ocurridos, la cuenta del desastre de inmuebles en colapsos de 2 mil 340 templos históricos, así como más de 6 mil bienes muebles, como retablos, murales, pinturas, libros, documentos y esculturas de nuestra cultura y de nuestras creencias religiosas.
Pueblos y comunidades de 11 Estados de México sufrieron fallecimientos de seres queridos, así como de sus espacios donde se encuentran para rezar o enfrentar el dolor o la alegría en ceremonias familiares, vieron sus esculturas rotas, sus murales caídos, sus pinturas rasgadas , sus hermosos retablos aplastados por pedazos de cúpulas y techos, desconsolados por ver el patrimonio de siglos en el suelo y pensar que jamás lo recuperarían.
Familias y organizaciones culturales y religiosas que vieron también sus hogares afectados y caídos pedían en su desesperación que primero reconstruyeran sus templos, restaurarán sus esculturas y más, antes que sus propias casas.
México es un país con altos valores culturales e históricos y de creencias ancestrales, con una fortaleza familiar que pocos países pueden presumir y con instituciones fuertes, como el INAH reconocidas en el mundo como un ejemplo en su organización y respuesta en la protección del patrimonio cultural, por encima de intereses políticos o económicos.
Por eso se valora que el Presidente de la República, Ándres Manuel López Obrador, junto al Director General del INAH, Diego Prieto Hernandez, caminen juntos y estén dentro de la preocupación de la reconstrucción y restauración de estos miles de bienes afectados, dando resultados a la fecha de más de mil 100 templos rehabilitados y bienes muebles restaurados, no es fácil ni común ver a autoridades como gobernadores, presidentes municipales, senadores o diputados preocupados por la cultura.
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El pasado viernes por la noche se inauguró la reconstrucción de un tramo de la emblemática avenida hoy llamada Carranza y originalmente Avenida del Centenario, que inauguró en 1910 Porfirio Díaz en la capital de San Luis Potosí.
El evento lo encabezó el Gobernador Juan Manuel Carreras López, el Secretario Federal de Turismo Miguel Torruco Marquez y el Embajador de los Estados Unidos Christopher Landau, un esfuerzo de varios años que dignifican el patrimonio e historia de una ciudad y de su pueblo.
Esperemos más gobiernos y más líderes que vean por la “Construcción y Protección “ del patrimonio el cual también es proyecto productivo y de empleo, además de ser la esencia antropológica de los mexicanos. [nota_relacionada id=1242922]
Desde San Luis de la Patria, fraternalmente,
ARQ. JUAN CARLOS MACHINENA MORALES
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