Las propuestas no solicitadas (PNS) se definen como aquellas que realiza y presenta una empresa privada por iniciativa propia sobre proyectos de infraestructura público-privados que no responden a solicitudes particulares del gobierno, pero consideran una problemática a resolver, atienden necesidades de la población y plantean mejoras en eficiencia de ejecución, operación y mantenimiento.
En nuestro país, esta figura se encuentra en la Ley de Asociaciones Público Privadas (LAPP) del gobierno federal y en 22 de las leyes locales; en ellas se establece que, los proyectos presentados bajo esta modalidad deben cumplir con dos premisas:
1. Estar vinculados a los objetivos nacionales, estrategias y prioridades del gobierno.
2. Cumplir con características técnicas mínimas.
Las PNS presentan diversas ventajas, entre las principales: A) Incrementar la cartera de proyectos de infraestructura del país. B) Introducir aspectos de innovación; sin embargo, en México, esta figura ha sido poco explorada y, sus ventajas, subutilizadas. A la fecha, a nivel federal, tan sólo nueve de los proyectos de Asociaciones Público-Privadas autorizados tuvieron un origen bajo dicho esquema; a nivel estatal, resulta difícil identificarlos.
Si bien dicha estrategia es positiva y favorece el desarrollo de proyectos de infraestructura, es muy importante dar competitividad y dotar de transparencia durante todo el proceso; de acuerdo con el Banco Mundial, en un estudio realizado en 2017 para 15 países sobre su experiencia al usar dicha modalidad, los factores de éxito son los siguientes:
1. Es fundamental que el gobierno sea el líder del proyecto, es decir, debe estar presente desde que la PNS es recibida hasta el cierre del proyecto.
2. El gobierno debe contar con un grupo al interior que tenga la capacidad técnica para analizar las PNS.
3. Se debe organizar un proceso licitatorio competitivo.
4. El gobierno debe contar con consejeros externos, que tengan solvencia técnica y que lo apoyen en todo el proceso.
Adicionalmente, recomiendan crear incentivos para fortalecer la calidad de las PNS:
1. Que exista un mínimo de requerimientos técnicos, económicos, sociales, legales y ambientales para que la PNS sea considerada por el gobierno.
2. Una tarifa de revisión para el proponente; es decir, que el privado pague una cuota para que su PNS sea analizada por el gobierno.
3. Que el proceso de revisión sea en dos etapas, así, en la primera, se eliminan aquellas que no cumplen con los requerimientos mínimos.
4. Criterios y procesos de evaluación claros.
5. Un área específica del gobierno que se encargue de todo el proceso.
6. Una ventanilla de recepción para este tipo de propuestas.
Entonces, la pregunta es:
En México… ¿Cuáles son los pasos a seguir para fomentar PNS de calidad e innovadoras? [nota_relacionada id=1176265]
Me parece que, aunque ha habido avances en el gobierno con este tipo de solicitudes, todavía está pendiente de que los procesos de recepción, presentación y análisis de
PNS sean más claros, donde, además del marco normativo general, existan lineamientos específicos por dependencia y sector; adicionalmente, contar con áreas específicas para la revisión y dictaminación de proyectos público-privados, tanto a nivel federal como local.
Las PNS bien administradas definitivamente son un detonante para el desarrollo de infraestructura público-privada y como lo he establecido anteriormente, es necesario, de hecho, urgente, reactivar la industria de la construcción, pensemos en esta solución como una alternativa más a explorar…
ÚRSULA CARREÑO COLORADO
SOCIA FUNDADORA DE DUOMO BRUNELL, S.C.
@URSUCARRENO
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