La Industria Mexicana de Bebidas alzó la voz ante los comentarios del subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell quien tachó a sus productos de “veneno embotellado”, pues desde hace varios años han trabajado arduamente en renovar sus fórmulas pensando en la salud de los mexicanos, por lo que actualmente 55% de sus productos son bajos y/o sin calorías.
La Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC), que preside Antonio Guillén Rivera, refirió que estos comentarios del funcionario estigmatizan a una industria que cumple a cabalidad con todas las normas y regulaciones en nuestro país, asimismo, representan un trato inequitativo hacia el sector, al satanizar una actividad estratégica para la economía y a un producto que está en la preferencia de millones de consumidores.
Y es que desde el año 2014, la ANPRAC asumió con responsabilidad la parte que le toca como industria en la búsqueda de soluciones, y su trabajo se ha reflejado en disminuir 11% el contenido calórico de sus productos y éste seguirá, pues la meta para 2024 es una reducción adicional de 20 por ciento. De hecho, reiteró su apoyo al llamado del presidente Andrés Manuel López Obrador, en favor del diálogo y, no obstante la estigmatización de algunos funcionarios, seguirá con su compromiso por el bienestar de los consumidores mexicanos.
Respecto del estudio académico del International Journal of Obesity, para la ANPRAC no abona a la solución integral de la obesidad y diabetes que enfrenta nuestro país ni al desarrollo de una estrategia de Estado. De acuerdo con la FAO, sólo 5.8% de las 3,260 calorías que consumen diariamente los mexicanos provienen de bebidas saborizadas y más de 70% vienen de alimentos y bebidas no industrializadas; por lo que resulta ilógico pretender responsabilizar a estos productos de 7% de las muertes a nivel nacional, asevera.
La ANPRAC, representa a 120 empresas mexicanas productoras de refrescos y emplea a más 1.6 millones de personas. Se manifiesta abierta a participar en el llamado del gobierno federal para construir una “estrategia de Estado”, en las que estén involucradas autoridades, organizaciones civiles y la iniciativa privada.
Cash
La pandemia provocada por el COVID-19 aceleró las propuestas de aprendizaje y formación digital de colegios, universidades, escuelas de negocio o empresas.
Ante ello, la firma de origen español Odilo, que dirige Rodrigo Rodríguez, enfocada en proveer contenidos digitales y servicios de aprendizaje, realiza una inversión de 220 millones de pesos (10 millones de dólares) para expandir sus operaciones en México.
En la actualidad, proveen sus servicios de aprendizaje ilimitado a las Secretarías de Educación de Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Durango y Jalisco, de tal forma que millones de alumnos, docentes y sus familias tienen acceso a miles de contenidos educativos. También brindan sus servicios a empresas como Grupo Salinas, Nestlé y HP, por mencionar algunas.
Con esta inversión, la firma española espera aumentar su equipo local, ampliar su red de socios estratégicos, y reforzar sus alianzas con todos los proveedores de contenidos digitales y de soluciones digitales en el país. [nota_relacionada id=1148936]
POR MILÉN MÉRIDA
FINANZASALPORTADOR@GMAIL.COM
@MILEN_KA
irv / eadp
Escucha aquí nuestro exclusivo podcast de Coronavirus: