Con la justificación de la pandemia global de COVID-19, Cuba impulsó la suscripción de convenios con diversos países del mundo para enviar a médicos que coadyuvaran en el combate contra el nuevo coronavirus. México no fue la excepción y en la capital empezaron a trabajar elementos provenientes de la Isla hacia finales de abril. Según datos de la Secretaría de Salud de CDMX, el convenio firmado por el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (INSABI) contempla la participación de 585 médicos con un pago de 135 millones de pesos.
Los colegios médicos reclamaron que en México lo que se necesita es presupuesto para abrir nuevas plazas y contar con médicos y enfermeras suficientes para atender no solo la pandemia, sino la dinámica cotidiana en los hospitales mexicanos. La 4T optó por la indolencia, esa que ha quedado en evidencia frente a las manifestaciones del personal de salud que desde hace meses pide insumos y equipos de protección.
Pero los médicos nunca han sido una prioridad para el gobierno mexicano quien se ha encargado de minimizar su rol para el desarrollo nacional. Recordemos que, a inicios de mayo, el tabasqueño los descalificó afirmando que solamente buscaban enriquecerse.
Sorprende que, pese a que los contagios y fallecimientos siguen incrementándose, el presidente sigue afirmando que la crisis provocada por el COVID-19 no los ha rebasado, cuando todos sabemos que las cifras están maquilladas y no se tiene certeza alguna de la magnitud de la pandemia. Incluso con datos no confiables, nuestro país es el séptimo lugar a nivel mundial en cuanto a fallecimientos y el número 11 sobre casos confirmados.
Lo que sorprende es que el gobierno mexicano está más preocupado haciendo acuerdos con gobiernos extranjeros cercanos ideológicamente que invirtiendo en el personal sanitario y todo en la total opacidad. Cabe señalar que el contenido del convenio entre el gobierno cubano y el INSABI no es público, aunque preocupan muchas de sus disposiciones. La Secretaria de Salud de la capital confirmó que el pago por los servicios prestados por los médicos cubanos no es entregado a ellos directamente, incluso las autoridades capitalinas no conocen siquiera qué parte del monto total pagado con recursos de los contribuyentes mexicanos, reciben los médicos por su trabajo.
Lo anterior preocupa porque significa que contrataron personal sin cerciorarse de que sus condiciones laborales respeten los compromisos internacionales en la materia, además de someter a un abandono imperdonable a nuestros médicos frente a una pandemia que está devorando al país.
[nota_relacionada id= 1108219]POR MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO
SECRETARIA DE ASUNTOS INTERNACIONALES DEL COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL DEL PARTIDO ACCIÓN NACIONAL
@MARIANAGC
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