El COVID-19 nos ha traído puras malas noticias y una serie de especulaciones e incertidumbre, que cada día nos hace pensar y repensar cosas diferentes. Por supuesto que esto también aplica perfectamente para el ámbito deportivo. Basta con voltear a ver el panorama que teníamos hace algunas semanas y el que tenemos hoy viernes.
Por ejemplo, en el beisbol, los encuentros a puerta cerrada son una opción que se ha planteado en diferentes países, pero que, hasta ahora, únicamente Taiwán va a comenzar a aplicar; Estados Unidos sigue en evaluaciones y en México, particularmente la Liga Mexicana de Béisbol (LMB), ya descartó la opción. Aunque todo podría pasar, les digo que estamos viviendo una época de incertidumbre.
Y es que es lógico, a comparación de otros deportes, o quizá el mismo beisbol, pero en diferentes lares del mundo, aquí en nuestro país es necesaria la presencia de los aficionados en los estadios por cuestiones de venta y mercadotecnia. Si bien los patrocinadores son fundamentales para que los equipos sobrevivan, el consumo en los parques de pelota es necesario.
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En cuanto a las Grandes Ligas, únicamente están esperando a que las autoridades de salud correspondientes den el visto bueno para que, a su vez, el comisionado de la MLB, Rob Manfred, dé el banderazo y se pueda jugar en diferentes áreas de Phoenix, Arizona. Se utilizarían estadios para pretemporada y también el Chase Field, casa de los Diamondbacks de Arizona.
En fin, habrá que ser pacientes –así como lo hemos sido estas últimas semanas– para ver qué deciden las autoridades de salud y deportivas. Mientras tanto, en lo que sí podemos ayudar es a acatar en la medida de lo posible las recomendaciones sanitarias para que todo esto se esfume lo antes posible.
¡TIGRES, 65 AÑOS DE GRANDEZA!
Los que me conocen, saben lo que los Tigres de Quintana Roo (antes Tigres Capitalinos) significan y representan para mí. Es el equipo de mis amores; el equipo con el que viviré y moriré. Y claro que iba a aprovechar este espacio, para que, a nombre de mi papá, –culpable del amor que siento por este equipo–, y un servidor, extendiéramos una felicitación a toda la directiva, jugadores, cuerpo técnico y demás integrantes para por sus 65 años de vida.
Gracias, Tigres, por tantas alegrías y satisfacciones; gracias a los que han hecho posible que esta institución sea una de las más ganadoras de nuestro país y por mantenerse con esa calidad y nivel necesarios en los diamantes. Desde mi butaca como aficionado, seguiré apoyando y coreando esas porras, que, así como yo, disfrutamos todos los seguidores de la garra felina cada vez que vienen a la capital. ¡Felicidades, Tigres!
POR MANUEL ZAMACONA
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