COLUMNA INVITADA

Aprende en casa-3

El programa puede evolucionar reforzando su vinculación con las comunidades escolares

OPINIÓN

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Fernando Ruiz/ Colaborador/ Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

Estamos en la última semana de clases televisivas de 2020 y es necesario reflexionar sobre el rumbo que tomará la educación a distancia en México. A diferencia de otros países, en el nuestro se optó por hacer de las clases televisivas la columna vertebral de la estrategia educativa ante la emergencia sanitaria.

En una entrega pasada (El Heraldo, 07/oct/2020) describimos las limitaciones que para el aprendizaje de niñas, niños y adolescentes (NNA) tiene el diseño e implementación de Aprende en Casa 2. Con datos de junio de este año el último reporte de CONAEDU señaló que la mitad de los estudiantes se aburrieron y 46% de los maestros lo consideran insuficiente para el aprendizaje. Será necesario que el próximo año haya una evaluación de sus resultados y del impacto en los aprendizajes de los NNA.

A pesar de lo anterior, es justo felicitar a la Secretaría de Educación Pública (SEP), en especial a la Subsecretaría de Educación Básica y el área de televisión educativa, por la tremenda energía depositada en todos estos meses para echar andar este formidable proyecto. Construir una oferta de contenidos de acceso universal puede ser insuficiente para que todos los niños aprendan pero proporcionó una base accesible para no pocos estudiantes. Ahora que se cuenta con un espacio educativo en la televisión nacional sería lamentable regresarla a su condición marginal previa. Con base en lo logrado este año debemos plantearnos la necesidad de utilizarla como plataforma clave para una estrategia híbrida para el aprendizaje.

Es previsible que en 2021 la reapertura de las escuelas sea compleja y variada. Ante eso, es indispensable no sólo darle continuidad a las transmisiones el tiempo que sea necesario sino transformarlo en un instrumento al servicio de las NNA. Aprende en Casa puede evolucionar reforzando su vinculación con las comunidades escolares y con las otras vías de aprendizaje a distancia.

Es posible hacer de la televisión educativa un laboratorio para la innovación docente y la participación de las comunidades escolares. Las clases en vivo y participación rotatoria de escuelas pueden contribuir a ello. También es posible hacer crecer a personaje como “Ajolisto”, “Raúl” o “Toribio”, copiando la experiencia de la televisión comercial, atraer concursos de conocimientos, ampliar el uso de cuentos y leyendas en lenguas indígenas, entre otras posibilidades.

Asimismo, se debe fortalecer la estrategia multiplataforma orientándola hacia la recuperación, reforzamiento y nivelación intensiva de aprendizajes. Es importante que todos los acervos públicos de contenidos estén vinculados con estrategias claras de aprendizaje en línea, programas de formación docente, cuadernillos, libros de texto y materiales educativos así como con las transmisiones radiales, en especial las comunitarias e indígena.

El reto de los próximos años será lograr la recuperación de los aprendizajes perdidos en 2020, por ello, exigimos a las autoridades educativas, federales y estatales, que den a conocer lo más pronto posible la estrategia general para lograrla. Desconocíamos la magnitud de la emergencia sanitaria pero ahora tenemos claro el impacto negativo que está generando. Una nueva versión de Aprende en Casa es una pieza que puede jugar un rol clave para las comunidades escolares.

POR FERNANDO RUIZ
DIRECTOR DE INVESTIGACIÓN EN MEXICANOS PRIMERO
@FRUIZ_RUIZ