COLUMNA INVITADA

Mejorarán pensiones para discapacidad y adultos mayores

Para este gobierno, la protección social es uno de los pilares que debe garantizar niveles básicos de ingreso para atender las principales causas de la pobreza

OPINIÓN

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Edgar F. Garza Ancira/ Colaborador/ Opinión El Heraldo de México.

Las personas con discapacidad y los adultos mayores en México, en buen porcentaje se encuentran en pobreza y sin acceso a un sistema de protección social. De acuerdo con datos oficiales, el 30% de las personas adultas mayores no tienen ni pensión ni apoyo de programas sociales.

Por consiguiente, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, se encarga a través del Programa para el Bienestar de las Personas con Discapacidad y de los Adultos Mayores de dotarlos de los recursos económicos y sociales, para que cuenten con mejores condiciones de vida digna y plena.

Para este gobierno, la protección social es uno de los pilares que debe garantizar niveles básicos de ingreso para atender las principales causas de la pobreza, mediante la aportación de apoyos para su alimentación, higiene, salud, entre otros, que, bajo las condiciones actuales, les ha permitido enfrentar de mejor forma, la pandemia del COVID-19.

Para el 2021, dentro del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), se propone reasignar 1,754 millones de pesos para el programa de pensiones a personas con discapacidad permanente y pensión para adultos mayores, los cuales se obtendrían de recortes al Poder Judicial, al INE, al Congreso y a la Fiscalía General de la República. 

El mayor incremento lo tendrá la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente, que en el país son más de 997 mil personas, contando en 2021 con un presupuesto de 15 mil 456 millones de pesos, es decir, 30.2% más de los 11 mil 905 millones de pesos autorizados para el 2020.

Y el programa de Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores, conocido como 65 y más, atiende a más de ocho millones 26 mil adultos mayores que reciben esta pensión, previendo un presupuesto superior a los135 mil millones de pesos, lo que se traduce en un incremento de 6.8% respecto de los 126 mil 549 millones de pesos del 2020. 

El total de beneficiarios de los dos programas supera los nueve millones de derechohabientes, donde cada beneficiario recibirá 2,700 pesos bimestrales.

Estos dos programas son muy importantes ya que permiten reducir los riesgos de vulnerabilidad económica, conteniendo la situación de pobreza en que viven estos dos sectores vulnerables, al apoyarlos con recursos que les permitan llevar una mejor calidad de vida.

Los programas tienen el potencial de constituirse en un elemento clave para la articulación de distintos esfuerzos y corregir la situación de estos grupos vulnerables, a través de una política de Estado que siga mejorando la atención de estas poblaciones. 

La pandemia nos dejará como experiencia que debemos generar sistemas de protección social financiados colectivamente, integrales y universales, que construyan una sociedad y una economía capaz de brindar ayuda y protección a todos estos sectores. 

POR EDGAR F. GARZA ANCIRA
CONSEJERO DE EMPRESAS Y CONSORCIOS DE CARÁCTER MULTINACIONAL, ASÍ COMO FUNDADOR DE LA ASOCIACIÓN CIVIL DIME Y JUNTOS LO HACEMOS