El pasado 7 de octubre, el canciller Marcelo Ebrard presidió, de manera remota, una reunión en la que participó el doctor David Kershenobich, director del Instituto Nacional de Nutrición; el doctor Peter Seeberger, director del Instituto Max Planck y el doctor Wang-Shick Ryu, del Instituto Pasteur de Corea. El encuentro fue moderado por la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Martha Delgado. También participamos el embajador de México en
Corea y quien escribe estas líneas.
El objetivo fue revisar el avance de los ensayos clínicos de fármacos para el tratamiento de COVID-19 en estos países. La reunión demostró el compromiso de la Cancillería y del gobierno de México en la gestión internacional de la pandemia con una política exterior que contribuya al fortalecimiento de la salud pública en nuestro país.
La política exterior de México incluye un componente de promoción en el ámbito de la cooperación científica en salud que suma, efectiva y eficientemente, a la atención de las apremiantes necesidades de nuestra sociedad.
La embajada de México en Alemania y las autoridades del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo coincidimos en fortalecer la cooperación bilateral en materia de salud, sin descuidar otras áreas relevantes para el desarrollo económico y social mexicano. Trabajamos en la investigación científica y la cooperación técnica. Actualmente, gestionamos proyectos en materia de investigación conjunta, pruebas serológicas y ensayos clínicos de fármacos y vacunas contra COVID-19.
Este año, el espacio más importante de nuestra agenda lo dedicamos a la gestión de temas relacionados con el sector salud y la pandemia.
Trabajamos convencidos de la relevancia que tiene nuestra labor para la Secretaría de Salud, los institutos nacionales, hospitales, personal médico y de atención a la salud, centros de investigación, y, sobre todo, para los mexicanos.
Estos esfuerzos han logrado grandes avances. El proyecto de cooperación con el Instituto Nacional de Nutrición es un ejemplo de ello. Sin embargo, hace falta más para alcanzar los niveles de intercambio que nos hemos trazado. Construimos proyectos con las instituciones alemanas más prestigiosas como el Instituto Roberth Koch, la Sociedad Max Planck, la Sociedad Leibnitz, el hospital “Charité” de Berlín y el Servicio Alemán de Intercambio Académico, por mencionar algunas.
Hoy, la diplomacia mexicana no se explica cabalmente sin tomar en cuenta el trabajo que la Secretaría de Relaciones Exteriores y el servicio diplomático mexicano en el exterior realizamos en la promoción del intercambio científico en materia de salud. La conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador del 13 de octubre, con el canciller Ebrard exponiendo sobre la gestión de las vacunas contra COVID-19, hizo evidente que la diplomacia mexicana está al servicio de la salud de nuestra sociedad.
POR ROGELIO GRANGUILLHOME
EMBAJADOR DE MÉXICO EN ALEMANIA
@RGRANGUI