LA NAO DE CHINA

China: ¿Biden o Trump?

El nivel de tensión entre Estados Unidos y China es alto. Prueba de ello fueron las mayormente negativas alusiones al país asiático en los recientes debates

OPINIÓN

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Adolfo Laborde/ Colaborador/ Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

Faltan 19 días para que se realicen las elecciones presidenciales en Estados Unidos. El resultado es de pronóstico reservado, pues independientemente que Biden lleve la delantera en las encuestas, no hay que olvidar lo que sucedió en la elección pasada con Hilary Clinton. Lo cierto es que gane quién gane, traerá repercusiones sustanciales y definitivas para el mundo entero. 

Sin embargo, el caso de la relación que el gobierno de EU guarde con China, es de primer orden. 

Según quien esté al frente de la Casa Blanca, la relación con el gigante asiático podría modificarse o no. Como hemos dado cuenta en esta columna, el nivel de tensión entre Estados Unidos y China es alto. Prueba de ello fueron las mayormente negativas alusiones a China tanto en el debate presidencial entre Biden y Trump, como entre los candidatos a la vicepresidencia Kamala Harris y Mike Pence. La espiral de confrontación no cesa y seguramente la guerra comercial, el embargo a empresas tecnológicas, el enfrentamiento en Asia por las disputas territoriales, el intercambio de declaraciones y acusaciones entre ambos países por el COVID-19 serán una constante en caso de que Trump continúe en el poder. 

Por lo que respecta a Biden, probablemente el fondo de la discusión no cambie; habrá una resistencia de Estados Unidos a lo que ya está en marcha, es decir, una transición de poder en el mundo. Pero las formas serán otras, lo que quizá le quite presión a la relación bilateral; sin embargo, las disputas comerciales y la pelea por la influencia global no cesarán. 

De acuerdo con el politólogo estadunidense Francis Fukuyama (2020) en una reciente conferencia en la Fundación por la Libertad, “muchas empresas estadounidenses están muy enojadas por el tema de la falta de protección a su propiedad industrial, por lo que han dejado o piensan dejar a China como el centro de su producción y ahí ha habido un consenso entre republicanos y demócratas”. 

El problema, según Fukuyama, radica en la forma en que Trump ha lidiado con China, especialmente por el origen de la pandemia y por sus prácticas comerciales. Igualmente, consideró que si Biden gana la elección, regresará a la normalidad. Pero existe un gran problema para Estados Unidos ya que después de la desbandada en masa de expertos del Departamento de Estado, no hay muchos cuadros de especialistas que puedan enfrentar los grandes retos de la relación con China y otras regiones. Desde la óptica de Fukuyama, esto no se solucionará de la noche a la mañana. 

Mientras tanto, China ha redoblado, a través de su programa la Franja y la Ruta, su cooperación sanitaria y de infraestructura en todo el mundo. De hecho, esto ha quedado claro en el reciente libro de Xi Jinping denominado La gobernanza de China, parte III (The governance of China III), y donde anuncia la futura hoja de ruta de la diplomacia china, a través de planes quinquenales que van más allá de una administración demócrata o republicana.

 

POR ADOLFO LABORDE
ANALISTA INTERNACIONALISTA
ADOLFOLABORDE71@GMAIL.COM