Los Sussex y su caja de Pandora

Los tabloides sensacionalistas ya adelantan un posible mal uso de sus conexiones reales para hacer dinero

El drama de los Sussex no termina. Aunque Meghan Markle y el príncipe Enrique se alejen de las actividades oficiales de la realeza, no se librarán tan fácil del escrutinio de los medios, y el camino para hacerse de fondos se avizora complicado.

Tras llegar a un acuerdo con la reina Isabel II, se determinó que la actriz y el príncipe, sexto en la línea de sucesión a la corona británica, ya no recibirán dinero público ni se les llamará “su alteza real”, pero se les podrá seguir nombrando “duques”, un asunto que sin duda será clave para generar recursos.

Los tabloides sensacionalistas británicos, que se han vuelto “los enemigos” de la pareja y la principal razón de su alejamiento de la familia real, ya adelantan un posible mal uso de las conexiones reales de la pareja para hacerse de dinero.

Uno de los principales asesores de la reina, Thomas Woodcok, ha advertido su preocupación de que se usen ilegítimamente los símbolos royals con fines comerciales.

Actualmente, el matrimonio tiene una cuenta de Instagram y un sitio web llamados Sussexroyal, lo que ha causado dudas sobre si deberían o no usar esa marca.“No creo que sea satisfactorio. Uno no puede ser dos cosas a la vez. O eres royal o no lo eres”, declaró recientemente Woodcok. Aunque la última palabra es de la monarca.

Y es que Meghan Markle desea capitalizar su imagen y que su fundación Sussex Royal —que se espera sea lanzada en abril— siga el modelo de fundaciones como las de los Clinton o los Obama; pero, al menos en Reino Unido, podría encontrar piedras en su camino para recaudar fondos.

Meghan y Hillary se han vuelto cercanas; en noviembre pasado la ex candidata presidencial visitó a los duques y su hijo Archie en su casa de Frogmore Cottage (cuya remodelación costó 3.05 millones de dólares de dinero público). Sorpresivamente Clinton ha declarado que “(con Meghan) me siento como una madre, sólo quiero abrazarla”, y la ha defendido asegurando que Markle ha sido criticada por su condición de raza (su mamá es afroamericana).

Además de la obtención de fondos, otro dolor de cabeza será el pago de impuestos, ¿dónde lo harán? ¿En Reino Unido, donde pasarán una temporada; en Canadá donde vivirán también, o en Estados Unidos, de donde es originaria Meghan?

También se ha especulado de un interés de los duques en crear su propia productora y de Meghan en aventurarse al mundo de la moda y los cosméticos. A Markle aún le espera un trago muy amargo, en su demanda contra The Mail on Sunday se espera que su padre Thomas, con quien no tiene una buena relación y que la ha acusado de tener un síndrome de superioridad, testifique contra ella.

Y tras todo el escándalo, los duques no obtuvieron todo lo que deseaban, querían no recibir fondos públicos, pero seguir representando a la reina; algo que se determinó, no podrán hacer bajo ninguna circunstancia.

Al parecer, sus deseos de mayor libertad e independencia financiera en realidad abrieron una caja de Pandora [nota_relacionada id=824856]

POR ALEJANDRA MARTÍNEZ

ALEJANDRA.MARTINEZ@HERALDODEMEXICO.COM.MX 

@ALEJANDRAMTZ_87

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