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Defendamos nuestra democracia

OPINIÓN

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Cuántas veces hemos leído y oído hablar sobre la democracia, su importancia y la necesidad de procurarla y cuidarla de aquellos actos y personajes que atenten contra ella. Sin duda, muchas veces.

No obstante, hago votos para que esa idea que puede parecer paranoica, no sea olvidada ni menospreciada, pues me parece que, por ciertos hechos recientes, cobra mucha vigencia el llamado permanente a vigilar que nadie pretenda vulnerar las conquistas democráticas que se obtuvieron, producto de luchas ciudadanas que datan de décadas atrás.

Si bien el sello distintivo de este sexenio ha sido el autoritarismo en el interior del gobierno, hasta ahora no habíamos visto un acto tan vil y descarado como el que se dio en Baja California, donde un grupo de políticos de Morena, PAN y PRI hicieron el trabajo sucio del gobernador de esa entidad y ampliaron su periodo de gobierno de dos a cinco años.

Sobre este tema ya ha habido muchas reacciones, la mayoría de ellas en contra. Sin embargo, como ciudadanos debemos ser los primeros en alzar la voz y exigir que se respeten las leyes fundamentales, y los principios y valores democráticos, de lo contrario, éste podría ser un pésimo precedente para los actuales y futuros gobernantes en nuestro país.

La apatía es la mejor arma de los políticos para que, junto con el financiamiento público que reciben, puedan mantenerse en el poder.

Por ello, mantengo mi exhorto permanente participar más alzando la voz y exigiendo cambios profundos a la manera en que se acostumbra hacer política, así como reflexionar qué tanta importancia le vamos a otorgar los partidos para que continúen repartiendo cargos púbicos a los mismos personajes de siempre que alternan de partido, en busca de beneficios personales, tantas veces como sea necesario.

El costo del financiamiento a los partidos políticos está privando a muchos ciudadanos de la posibilidad de acceder a mejores servicios de salud, educación o transporte.

Lo acontecido en Baja California es la muestra perfecta del porqué se debe de disminuir la importancia que se le da actualmente a los partidos políticos y la necesidad de enfocar esa atención a las necesidades reales de la ciudadanía, pero claro, como ningún político acude regularmente al IMSS o al ISSSTE, ni ocupa el transporte público frecuentemente, no tienen la menor idea de las necesidades auténticas que tenemos los ciudadanos, además de que no están dispuestos a privarse de los millonarios recursos que reciben por concepto de prerrogativas partidistas.

Los tiempos actuales exigen que quienes aspiren a hacer política, lo hagan por convicción y no por el incentivo económico que representa actualmente.

POR LORENA OSORNIO

EXCANDIDATA A LA JEFATURA DE GOBIERNO DE LA CDMX

@LOREOSORNIO_