La primera ocurrencia que tuvo Rosario Piedra Ibarra, titular espuria de la Comisión Nacional de Derechos Humanos – dicen sus detractores–, fue anunciar 20 medidas de austeridad en ese organismo, a fin de buscar un ahorro de 30 por ciento que se destinará a la atención de víctimas.
Al puro estilo de su jefe, patrón y guía espiritual, afirmó que no entrará al debate mediático de que si es espuria o no, porque jurídicamente se acabará por esclarecer toda la verdad. ¡Ah!, bueno.
Entre las medidas de austeridad destacan la eliminación de gastos de la presidencia en comidas, eventos y viajes; gastos de representación, bonos, apoyos, estímulos y otras canonjías. Desaparecen los comedores existentes asignados a la presidencia, pero se crearán comedores abiertos a todos los empleados y sus familias. Como los de Chayito. Se ahorrará en energía eléctrica, en agua, servicios telefónicos, de internet, gasolinas e insumos. Se elaborarán investigaciones con personal de la CNDH. ¿Se fortalecerá el organismo? Los perplejos dicen: Hay de piedras a piedras.
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AGENDA PREVIA: Con el fin de fortalecer proyectos e inversiones en nuestro país, principalmente en Oaxaca, el gobernador Alejandro Murat, el canciller Marcelo Ebrard y Rafael Martín, titular del corredor interoceánico, sostuvieron una reunión con el primer ministro de Singapur, país que ha mostrado interés en participar en el susodicho corredor. Después de las declaraciones del gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, de que en Nuevo Laredo grupos actúan con tintes de narcoterrorismo tomando como escudo a ciudadanos, y siendo Laredo una zona binacional estratégica donde se concentra el mayor número de circulación de mercancías por carretera de México a EU y viceversa, cualquiera podría pensar que es un mensaje para que el gobierno estadounidense tome cartas en el asunto a través de alguna de sus instituciones, como lo hizo en Sonora, luego del atentado a la familia LeBarón.
El Comité Nacional para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar (Conadesuca) alzó la mano en la consulta pública de la modificación de la NOM-051 de etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados. De entrada, expresa su preocupación por las repercusiones para la principal agroindustria del país; advierte que de 50 ingenios que operan en el país cerrarían 15, afectando a 57 mil productores y 7 mil obreros, con un impacto económico de más de 10 mil millones de pesos. Los especialistas en el tema preguntan: ¿En que se basa el Conadesuca para afirmar que casi 30% de los ingenios podrían cerrar por la nueva norma aprobada por el Legislativo? Ni en las peores crisis del sector se han cerrado tal cantidad de fábricas, señalan aquéllos. Lo que sí vale la pena señalar es que los legisladores que aprobaron las reglas para el etiquetado son medio ignorantes en el tema.
POR LUIS SOTO
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