Haz tu denuncia aquí

Causantes criminales

Criminalizar a la población por medio de leyes fiscales empezó con Calderón, se agudizó gravemente con Luis Videgaray, y se está radicalizando en este sexenio. Esto es injusto y pésimo para el desarrollo

OPINIÓN

·

El que escribe fue diputado federal durante la legislatura en la que el entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, impulsó el incremento de impuestos y criminalización del contribuyente, que llamó "reforma fiscal". En aquella época le argumenté a su subsecretario que estaban agrediendo a la gente que deberían cuidar: el ciudadano de a pie que busca cumplir la ley. En México, el contribuyente es chantajeado por el crimen organizado, cuya impunidad es producto de la complicidad gubernamental, y por el gobierno mismo, que lo tiene cautivo precisamente porque quiere cumplir con la ley.

En este sexenio se está ampliando la estrategia fallida de otorgarle aún mayor severidad a las leyes impositivas mientras los auténticos criminales prosperan. Se acaba con la presunción de inocencia, se atenta contra la propiedad privada, y se concentra, nuevamente, el poder, justamente en aquellos espacios en donde no debería de estar: la arbitrariedad.

Como siempre, la justificación se da en el contexto del peligroso mito de la "baja recaudación". Aquí, gente que debería ser más precisa, como José Ángel Gurría, de la OCDE, se ha unido al coro de personas que buscan incrementar los impuestos en nuestro país. No nada más es falso, sino que la tesis es peligrosamente equivocada en dos frentes. Primero, en que los impuestos son bajos. No lo son. Segundo, en que el gobierno tiene la capacidad de ejercer un presupuesto con una mínima eficacia y eficiencia. No puede. Corregir ambas deficiencias debería ser la principal prioridad. Nunca lo ha sido.

El tema de los impuestos bajos es, a primera vista, falso, ya que 16% de IVA, e ISR arriba de 30% están en la parte alta internacional. El que México recaude "sólo" 12% del PIB en impuestos tiene todo que ver con la impunidad del sector informal, que emplea a más de la mitad de la población y que se escuda con la imagen de pobreza. Claro que hay muchas personas de escasos recursos en la informalidad, pero también hay un mundo de mafias que lucran de esto y que se venden como víctimas, en vez de verse como los victimarios que son.

Cuando el equipo de Videgaray fue al Congreso a pedir agredir aún más al contribuyente mexicano, dijeron que “el efecto keynesiano” del incremento de impuestos causaría que cada $1 peso recaudado incrementaría la actividad económica 70%. En los hechos, cada $1 peso cobrado al ciudadano, redujo la actividad económica 40%. El gobierno no tiene la capacidad de ejercer el prespuestos que exije.

Como siempre, el problema principal es buscar soluciones fáciles (exprimir a los mismos cautivos), en vez de ponerse a gobernar (castigar a los criminales y empadronar a los informales). Mientras esto siga siendo así, México no logrará desarrollarse y la calidad de vida de todos se seguirá viendo mermada.

 

 

POR AGUSTÍN BARRIOS GÓMEZ

*PRESIDENTE DE LA FUNDACIÓN IMAGEN DE MÉXICO Y CONDUCTOR DE ADN40 NEWS

@AGUSTIN BARRIOSG

eadp