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Imagen violenta

todas las estrategias de promoción y en el deporte se nublan con brotes de violencia: cáncer económico y social

OPINIÓN

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Estimado fan, lo sucedido con la agresión multitudinaria al seguidor de Tigres no es un hecho que se deba ignorar ni mucho menos olvidar, porque la violencia es un mal progresivo que afecta al tejido social, aparte de sus daños económicos. El deporte no está libre de los problemas que aquejan a todo el país. Este 2018 pinta para ser el año más violento de la historia: En julio se registraron 18 mil asesinatos, con un incremento de homicidios en 74% en los recientes tres años, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). Sólo en Nuevo León, en 2017 hubo 678 homicidios dolosos, la quinta peor cifra histórica en el estado, después de los 2003 que sucedieron en 2011. Hasta agosto pasado el número oficial registrado por la Fiscalía General de Justicia estatal era de 455. En todo el país, 2017 tuvo la peor tasa de homicidios dolosos, con cifra de 9 mil 945 en su primer semestre, por 13 mil 298 ocurridos dentro del mismo periodo en el presente año. Homicidio doloso significa que hubo una intención de matar. Si observas detenidamente el video que se hizo viral en redes sociales, una treintena de sujetos vestidos o ataviados —algunos sin camisetas– con los colores azul y blanco de los Rayados de Monterrey persiguieron a Rodolfo Palomo Gámez, de 21 años de edad, que tenía la camiseta de Tigres mientras huía hasta que lo derribó el botellazo que precedió a otros golpes por piedra y tabique, y más de 20 patadas en la cabeza. También fue herido en el costado derecho, en apariencia por una botella rota, para quedar sobre un charco de su propia sangre, bajo plena luz del día, sobre las 18:30 horas. ¿Es posible que una persona sufra este ataque en la avenida Aztlán, siempre transitada, de un estado que se caracteriza por su modernidad? Se evidenció que sí. Los hechos ocurrieron a la vista de todos y sin intervención policial. La FMF y sus clubes agremiados Tigres y Monterrey emitieron comunicados para condenar con palabras los hechos y su repudio a la violencia, no sin antes excusarse de que todo se suscitó a unos cuatro kilómetros del estadio. Legalmente no les competerá, pero sí moralmente, porque los hechos fueron parte de la movilización del público en torno al clásico regio. Los clubes no permitirán el ingreso de las barras visitantes a los clásicos regios, pero lo que se requiere acá es educación. Y como dirían los abuelitos "la educación se mama", porque viene desde la casa. Estimado fan: tú puedes combatir la violencia desde el hogar. A los fans que son papás o tutores de niños y jóvenes: ¿cómo forman a sus hijos respecto a estos temas? Y, si eres menor de edad, y con mucho futuropor delante: aprende que no se puede vivir bien con miedo. La violencia daña la imagen del futbol. Después de estos hechos lo que menos desea una familia sensata es exponerse en lugares al alcance del vandalismo y la impunidad.

Por HÉCTOR QUISPE

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