El desdén de EPN

Pasaron los días y Peña Nieto no visitó los estados afectados por la tormenta tropical 19-E

En unas horas cayó la lluvia de todo un año. Además, por primera vez se formó un ciclón tropical, el 19-E, en el Golfo de California, frente a las costas de Sinaloa y Sonora. Por si fuera poco, su velocidad de desplazamiento era muy lenta, por lo que su poder de destrucción fue mayor. Inundaciones de hasta tres metros y medio en algunas zonas. Once de los 18 municipios de Sinaloa, más de la mitad del estado, tuvieron que ser declarados en emergencia. Tramos carreteros destruidos por daños, escuelas cerradas, hospitales afectados. El agua arrasó con lo que encontró a su paso, hubo quienes perdieron todo: casa, muebles, autos, ropa, documentos, recuerdos. Las imágenes eran de caos. Por los daños a los caminos hubo que abrir puentes aéreos para llevar ayuda a quienes quedaron atrapados, incomunicados. Casi 3 mil personas en albergues que requerían de todo. Tras la emergencia, vino la realidad, la verdadera dimensión de la destrucción, el recuento de los daños. Las casas y negocios destruidos, lodo por doquier, cadáveres de animales ahogados. Atender la salud y prevenir epidemias, la prioridad. En Sonora, menos grave, pero algo parecido. También 11 municipios declarados en estado de emergencia, entre ellos Hermosillo, la capital. En Chihuahua, el gobierno solicitó declaratoria de emergencia para 14 municipios, muchos enclavados en lo más profundo de la Sierra Tarahumara. Además, las corridas del tren Chihuahua al Pacifico, que atraviesa la sierra hasta Sinaloa, tuvieron que ser suspendidas. Pasaban las horas, los días, y nunca vimos al presidente Enrique Peña Nieto en las zonas afectadas, atendiendo la emergencia. En Los Pinos se consideró la posibilidad de que el Presidente viajara. Pero no, nunca ocurrió. Las lluvias azotaron el 19 y 20 de septiembre. Pasaron ese miércoles y jueves. Luego, viernes, sábado, domingo y el Presidente no reaccionaba. Se dijo que podría visitar las zonas dañadas antes de volar a New York para hablar ante la Asamblea General de la ONU. Pero no, tampoco. Peña Nieto prefirió asistir a la ONU y voló directo a NYC. Allí habló del cambio climático. Propuso crear un grupo internacional para atender la extraordinaria producción de sargazo, que tanto afectó nuestras costas del Caribe este año. Relacionó al fenómeno con el cambio climático, que muy probablemente también influyó en la tormenta tropical 19-E. Pero del desastre, ni una palabra. BON APPÉTIT: Quirino Ordaz Coppel, el gobernador de Sinaloa, enfrentó solo las primeras horas de la emergencia. Él sí suspendió un viaje internacional. Tenía programado estar en seis días en Estados Unidos y Canadá, para promover inversiones y turismo. Pasado lo peor, el gobernador recibió a medio gabinete federal (Sedesol, Sedena, Salud, Conagua, Infonavit, y CFE) para evaluar daños, planear la ayuda a damnificados y la reconstrucción de casas e infraestructura afectadas.   CACHOPERIODISTA@GMAIL.COM @CACHOPERIODISTA