AUNQUE EN LOS primeros meses del año llegó a evaluarse incorporar al jitomate en la negociación del TLCAN, al final se decidió que el comercio con ese producto se mantuviera aparte.
Y es que el “Acuerdo de Suspensión” bajo el cual se rigen las exportaciones de ese alimento desde 1996 se estima que ha resultado favorable para la evolución del negocio en México.
El volumen de producción del jitomate creció 22% del 2012 a 2017 para llegar a 3 millones 470 mil toneladas, lo que coloca al país en el décimo sitio del mundo.
También nuestras exportaciones avanzaron 58% en el mismo lapso al llegar a mil 583 millones de dólares (mdd). El jitomate es ya el tercer producto agroalimentario que más divisas atrae, sólo superado por el aguacate y las berries.
Con base en la determinación que se tomó de que este producto no fuera parte de las gestiones del acuerdo con EU, los productores nacionales representados por CAADES que lleva Ulises Robles o la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida de Oscar Woltman ya ni siquiera asistieron a Washington para acompañar al CNA de Bosco de la Vega.
De ahí que la apuesta se enfoque a renovar un nuevo acuerdo de suspensión, el cual está “en stand by” desde el 4 de marzo.
Más allá de la negociación del TLCAN entre ECONOMÍA de Ildefonso Guajardo y el USTR de Robert Lighthizer, no se crea que el asunto de esa hortaliza se ha mantenido estático.
Si bien los flujos comerciales se mantienen, los productores de Florida presionaron para tratar ubicar al tomate en un estatus de “temporalidad”.
Incluso han buscado con el Departamento de Comercio de EU a cargo de Wilbur Ross el que se acelere la investigación vs México por posibles violaciones de dumping.
Más allá de algunas fallas insustanciales que pueda tener México, no se cree que haya muchos elementos en contra. De hecho el Departamento de Comercio lo ha tomado con calma, por lo que los productores de Florida ya demandaron a esa dependencia con el argumento de retraso administrativo.
El juez en turno ya también solicitó un plazo para analizar el expediente y la información aportada por Ross y su equipo.
Como quiera parece improbable que la renovación del acuerdo se pueda dar este año y en todo caso habrá que esperar al primer trimestre del 2019.
Entre los asuntos que evalúan las autoridades de comercio de EU es la metodología utilizada para los precios de referencia con los que se maneja México para exportar.
Evidentemente los agricultores de Florida mueven sus fichas para tratar de cerrar los espacios a sus rivales.
No se descarta inclusive la búsqueda de apoyos con el gobierno de Donald Trump para resarcir su problemática. Se cree sin embargo que estos serían meros paliativos frente a la pérdida de competitividad que ha tenido ese estado.
Así que más allá del TLC con EU o un trilateral que incluya a Canadá, el jitomate mantendrá su propia inercia con el “Acuerdo de Suspensión” que lleva ya 22 años. Pronto nuestros productores deberán ser citados por la autoridad estadounidense para evaluar nuevas condiciones.
Nuevo acuerdo con EU para el jitomate quizá hasta 2019, presionan en Florida y demandan a su gobierno
*Mañana junta preparatoria de ASPA en Aeromar de cara a revisión contractual; levantan impasse inmobiliario en la CDMX; ya promueve AMLO Aeropuerto de Santa Lucía