Septiembre en las independencias latinoamericanas

Pronto se cumplirán los 200 años de las independencias de los países de Centroamérica

Septiembre es el mes en el que simbólicamente se reconoce el inicio de las independencias de varios de los países centroamericanos que hoy conforman la región mesoamericana, Chile y Brasil. Representa un punto histórico que marca el surgimiento de regional y de nuevas naciones americanas. Entre los actos fundacionales que se recuerdan está el inicio del establecimiento de un nuevo modelo político ajeno a la injerencia externa, las labores para la fundación de los congresos nacionales y la identificación de intereses comunes que estarán presentes ante las diferentes coyunturas internacionales desde entonces. Se celebra también el fin de muchas guerras con el comienzo de nuevas conciliaciones sociales, el establecimiento de nuevos regímenes administrativos y la participación de nuevas naciones en el nuevo sistema de relaciones internacionales que surgía en las primeras décadas del siglo XIX apoyado en movimientos independentistas en diferentes regiones del mundo. El día puede no ser el mismo para cada país, incluso el año, pero el sentimiento es común. Brasil reconoce el 7 de septiembre de 1822, México el 16 de septiembre y Chile el 18 de septiembre de 1810. Por su parte, el Acta de Independencia de América Central respecto al gobierno español se firma el 15 de septiembre de 1821 con la presencia de representantes de la región conformada por las provincias de Guatemala, Chiapas, Comayagua, San Salvador, Nicaragua y Costa Rica. Pronto se cumplirán los 200 años de las independencias de los países de Centroamérica y los países se preparan para esas grandes celebraciones. Para México, 1821 representa el fin del periodo reconocido por los historiadores como la guerra de la independencia que dio inicio en 1810, en ese periodo en que Latinoamérica daba respuesta a los anhelos de sociedades dispuestas a adoptar un nuevo rumbo. En 2018 las celebraciones ocurren en periodos de alternancias en el campo político interno en un periodo muy favorable a la integración regional, justo en un momento en el que se consolidan las estrategias comunes ante el entorno global. La presencia México–centroamericana estará visible a los ojos de pueblos y comunidades en las diversas regiones del planeta ofreciendo una ventana a la región con mayores medios que en épocas pasadas. La cultura regional se expresa en todas sus formas por todas las vías posibles. Presente en reuniones, actos oficiales y no gubernamentales alrededor del mundo estará accesible en casas, calles, ferias, espacios públicos, medios de comunicación tradicional y nuevos canales de comunicación digitales. En estas épocas es posible tener acceso a las fiestas de unos y de otros, así como de las comunes, como las que se celebran en varias metrópolis del mundo. El debate, diálogo público y renovación de las narrativas estarán presentes este año con la participación de una población regional que revela continuamente la determinación de participar activamente en la comunidad global.   *Catedrática