Hacer transparentes su actuación y sus decisiones es obligación de un gobierno popular y democrático. Como también lo es gobernar de frente a la ciudadanía, sin dobles caras ni evasivas.
Por eso, en el marco de la reconstrucción de la ciudad, derivada del sismo del 19 de septiembre, Claudia Sheinbaum advierte sobre la necesidad de establecer una relación directa entre gobernantes y damnificados, sin intermediarios.
Con ese espíritu, del 20 al 24 de agosto encabezó una gira por Tláhuac, Xochimilco, Iztapalapa, Benito Juárez y Coyoacán, cinco de las demarcaciones dañadas por el terremoto, en la cual participé como comisionado para la reconstrucción de la próxima administración.
En los recorridos ratificamos, a 11 meses del desastre, que miles de víctimas que viven en el oriente de la ciudad, aún no reciben una visita y menos ayuda alguna del gobierno, de manera sobresaliente quienes habitan en las zonas de grietas. Y que la información de la plataforma creada por el gobierno de la Ciudad de México es insuficiente.
En consecuencia, la jefa de Gobierno electa explicó a los damnificados que la primera tarea de la restauración consiste en elaborar, desde finales de septiembre, un censo de carácter social y técnico que revele el número exacto de inmuebles y familias afectados. Ya con un censo real, sabremos cuánto nos costará económicamente la reconstrucción de la ciudad, esos datos nos ayudarán a proyectar cuánto se gastará en este rubro en 2019.
Para regularizar las propiedades se efectuarán, asimismo, jornadas notariales. Y para terminar con el laberinto de la tramitología, la Comisión de Reconstrucción instalará una ventanilla única, abriremos módulos de atención cerca de los inmuebles y viviendas dañadas.
Desde luego, las labores al respecto no arrancan de cero. Pues si así lo aceptan los vecinos, se continuará con los acuerdos y trabajos ya iniciados por la presente administración.
Nuestro compromiso como nuevo gobierno es entregar una vivienda digna a todas las familias afectadas, Sheinbaum afirmó durante los recorridos que habrá apoyo igualitario para todos. Sin distingos. “O todos coludos, o todos rabones”.
Cabe subrayar que el proceso de reconstrucción impulsará esquemas de estricto orden social, contrapuestos a la obtención de negocios o ganancias privadas. De manera invariable, las decisiones las tomarán los vecinos, según las opciones que les formule el gobierno. Además, no habrá cabida al endeudamiento, ya que el apoyo gubernamental será a fondo perdido. Es decir, sin recibir contraprestación de ningún tipo.
Seguiré escuchando las necesidades y visitando a los damnificados, son nuestra prioridad. La reconstrucción no se detendrá hasta que la última casa o edificio dañado esté habilitado. Tengan certeza, no les vamos a fallar.
A partir del 5 de diciembre, no descansaremos hasta que los damnificados dejen de serlo.
COORDINADOR DEL GRUPO PARLAMENTARIO DE MORENA EN LA VII LEGISLATURA DE LA ALDF