Ana Lilia Herrera: Derecho, libertad y moral

¿Es necesario fortalecer nuestros valores? Sí, pero también urgen instituciones sólidas y leyes claras

¿Para qué necesitamos nuevas leyes si las que tenemos no se cumplen?, es la pregunta de muchas personas a quienes legislamos, en un país donde todos los días padecemos la corrupción e impunidad que generan el actuar de servidores públicos y de ciudadanos que se confabulan o se las ingenian para eludir una norma y sacar ventaja personal. El hartazgo social expresado en las urnas es, en gran medida, resultado de esa realidad. El hoy presidente electo se comprometió en campaña a elaborar una “Constitución Moral” y anunció que estará lista antes de que tome posesión el 1° de diciembre próximo y que, para tranquilidad de muchos, no tendrá carácter jurídico. Según explicó el coordinador de los trabajos, Jesús Ramírez, será un compendio de valores e ideas sobre la moral y la ética, “un Código Moral que tratará de recuperar los valores cívicos como parte de la Formación Educativa y eso deberá verse reflejado en los integrantes del gobierno”. ¿Es necesario fortalecer nuestros valores? Sí, pero también urgen instituciones sólidas, leyes claras y funcionarios que actúen en congruencia, así que esperamos eso del gobierno federal: ni más, ni menos y si lo desea, puede imponer a su equipo un Código Moral, pero dudo que sus gobernados necesitemos un presidente que, como dijo en campaña, procure el bienestar de nuestra alma, nuestros valores morales o espirituales. Vale recordar a quien pretenda olvidarlo, que vivimos en un Estado laico que protege y reconoce el derecho al libre desarrollo de la personalidad. En palabras del filósofo y jurista Rodolfo Vázquez, “el bien de una persona está dado por los fines que ella misma se propone y no por algún modelo de organización social globalizador impuesto dogmáticamente, que abarque todos los aspectos de su vida”, pues “la negación de la distinción entre estos dos sistemas de la moral, el privado y el público, es propio de los regímenes totalitarios, no de un Estado constitucional, liberal y democrático, de derecho”. Hace unos días se informó que la denominada Constitución Moral tendrá injerencia en la formación educativa. Ignoran que el Nuevo Modelo Educativo que entró en vigor a partir de este ciclo escolar, prioriza los valores humanistas. Perfeccionarlo, en todo caso, sería facultad de la SEP que al parecer no está convocada para la realización de este documento. Muchos queremos defender el régimen de derechos y libertades en el que vivimos. Alfonso Reyes en su Cartilla Moral, explica que “el bien no debe confundirse con nuestro interés particular en éste o en otro momento de nuestra vida. No debe confundírsele con nuestro provecho, nuestro gusto o nuestro deseo”. López Obrador tiene derecho a impulsar su visión, pero no puede ignorar ni la ley, ni la opinión de los más de 26 millones de mexicanos que no votamos por él, y que también queremos un mejor país, donde antes de pretender ideologizar, su responsabilidad será que todos podamos desarrollar nuestras capacidades y ejercer nuestros derechos y libertades.  
ANA LILIA HERRERA SENADORA Y DIPUTADA ELECTA @ANALILIAHERRERA