Alhajero
Julio Scherer Ibarra y Carlos Alazraki Grossmann. Recuerden sus nombres. Son ellos quienes más cerca están de Andrés Manuel López Obrador y de José Antonio Meade (respectivamente) en estas horas previas al último debate.
Ambos asesores con personalidades muy distintas: Alazraki esencialmente bravío e irreverente. Scherer analítico y amoroso.
Lo que ambos estrategas buscarán para sus Candidatos en este último enfrentamiento – a 19 días de acudir a las urnas- es tan alejado como sus maneras de ser y las de sus propios aspirantes a la Presidencia de la República.
Alazraki, de entrada, impuso lo que él mismo llama su “tiranía”: Se llevó desde ayer a Meade a Mérida, donde tendrá lugar el debate el martes por la noche, para empezar a practicar in situ.
Con ellos viajaron –según las fotografías enviadas por el equipo de comunicación de la campaña del abanderado del PRI-Verde-Nueva Alianza-, Juana Cuevas, Aurelio Nuño, Vanessa Rubio, Eruviel Ávila, entre otros.
Suponemos que van también (aunque no los vimos en las fotos) José Ramón Martell, que es quien suele hacer las veces de AMLO en las prácticas del debate; y Javier Lozano, que hace las veces de Ricardo Anaya.
En fin, que se la van a pasar “macheteando” durante horas, hasta que Alazraki considere que Meade está listo para ganar. Porque no lo duden, el publicista esta vez “va con todo”.
Los temas a debatir le ayudan. Particularmente los relacionados con la educación y con la CNTE –recuérdense tan sólo los spots al respecto- se prestan para atacar al tabasqueño.
Y respecto al candidato del PAN-PRD-MC, seguramente el ex secretario de Hacienda se le irá a la yugular. Su objetivo será desbarrancar definitivamente la candidatura del queretano para ubicarse en posición de obtener el voto útil o el estratégico.
Ya hubo una probadita la semana pasada con el video del hermano de Manuel Barreiro. Pero para que no quepa duda, ayer, en cuanto Meade bajó del avión en Mérida, declaró a los medios: “(Anaya) es un vulgar ladrón que desde el poder se robó dinero y que lo cacharon y debe de pagar las consecuencias.”
En cuanto a Scherer y López Obrador la historia es muy distinta.
Ambos andan ahorita –desde ayer y hasta mañana- en plena gira por Chiapas, con actos en plazas públicas en Tapachula, Huehuetán, Tonalá (ayer), Las Margaritas y Comitán (hoy), y hasta el término de ésta viajarán a Mérida.
De hecho, Julio es el mariscal de la Tercera Circunscripción. Pero además es un gran estratega.
¿Qué si (se) va a preparar Andrés Manuel para el debate?
Pues sí, a su estilo. Conversará la estrategia con Julio --quien hará todo lo posible además porque el tabasqueño descanse-, identificarán los puntos más sensibles y buscarán la manera de salir del paso sin engancharse en temas complicados.
La idea es que AMLO se muestre no sólo en el talante de “amor y paz”, sino de muy buen humor.
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