Todo lo que empieza tiende a terminar, todo los ciclos tienen un fin y esta semana fue una gran muestra de ello.
Semana de agradecer, semana de llorar y semana de melancolía por el último partido en la L iga MX de Rafa Márquez, y en la liga españo la de Andrés Iniesta. Empecemos por Rafa , quien debutó hace 22 años en Primera División con el Atlas.
Ha jugado y ganado cientos de partidos profesionales y es, sin duda, uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos en México. El capitán, El Kaiser , como le dicen, nació el 13 de febrero de 1979 en Zapopan, Jalisco y la semana pasada jugó el último partido en el estadio Jalisco con la playera rojinegra del Atlas.
Su sola presencia y su autoridad hacían la diferencia en la cancha y su talento lo llevó a jugar en uno de los mejores equipos del mundo, el Barcelona así como en otros equipos de Europa, además de ser el capitán de la Selección Mexicana.
Por otro lado, está Andrés Iniesta, para muchos el mejor futbolista que ha dado España, el que les dio el gol para la Copa del mundo, el que llegó hace 22 años a la Masía, en Barcelona, y que ha ganado 36 títulos en su carrera.
Esta semana anunció con lágrimas en los ojos en una conferencia de prensa que se va del Barç a. Ante sus compañeros, familia y directiva reconoció que se va de España y de Europa ya que prometió que nunca iba a jugar contra el Barcelona y que la única opción sería un equipo que no lo haga.
El Barça lo va extrañar, el Fantasmita y Don Andrés cómo le dicen, es cabeza, es piernas y es corazón. Indudablemente se retira con la sensación de que todavía podía dar más.
Pocos jugadores en la historia pueden presumir el ser ovacionados por todos los equipos rivales. Tal vez será el gol que le dio el campeonato a España, su caballerosidad, su fairplay o la suma de todas ellas. Aquí no importa la camiseta, no importa la edad, no hay manera de no reconocer y no rendirte ante estos dos grandes jugadores.
Capitanes, líderes, queridos y res- petados por sus compañeros han logrado que en lo per- sonal entienda porque amo tanto este deporte. Esperemos que los dos puedan jugar su última Copa del Mundo y que podamos disfrutar una vez más de ellos.
Lo único que queda es agradecer el poder haberlos visto jugar y entender que somos muy afortunados por vivir en la época de jugadores como ellos, Andrés Iniesta y Rafa Márquez.