Era cuestión de tiempo y finalmente le tomaron la palabra, Édgar Amador deja la Secretaría de Finanzas y le abre un área muy sensible al jefe de gobierno suplente, José Ramón Amieva, quien tendrá que hacer malabares para mantener el control del dinero.
Hace casi un mes Miguel Ángel Mancera dejó el cargo como jefe de gobierno y desde ese momento Edgar Amador se replegó, durante sus vacaciones se enteró de que le habían pedido la renuncia a su mano derecha la subsecretaria de Egresos, Verónica Rodríguez, la señal más clara de que iba a ser fuerte la presión política.
Volvió y presentó su renuncia en las oficinas de la jefatura de gobierno, que estaban cerradas porque José Ramón Amieva continuaba como encargado de despacho. Directamente Miguel Ángel Mancera le pidió que permaneciera, después el secretario de Gobierno le habló para que lo respaldara en el proceso que se venía, sería una mala señal irse antes de la ratificación por parte de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Muy pocas apariciones tuvo en este mes el ex secretario, una de ellas fue el foro que organizó la diputada federal Cecilia Soto para que en la Cámara de Diputados y el Senado se analizara la Ley de Coordinación Metropolitana del Valle de México, quizá porque la legisladora es muy cercana a su ex jefe. A Edgar Amador le tocó participar en la mesa de Financiación metropolitana, donde se refirió a que la gente prefería registrar sus vehículos en Morelos para evitar pagar la tenencia, es decir de los inocuo.
Al interior de la Secretaría de Finanzas las actividades que dependían del titular se detuvieron, ya no firmaba documentos, ni participaba en los trabajos de gabinete, ni acudía a las reuniones para ver los temas de los asuntos federales. Se presentaba a su oficina pero ya no operaba.
Fue a la toma de protesta de Amieva en la ALDF, se le vio acompañando al nuevo jefe de gobierno a la presentación de Guillermo Orozco como secretario de Gobierno, pero del elevador a la puerta de la oficina que llaman oval, no ingresó. Fue notoria su ausencia en el evento del 19 de abril, cuando se cumplieron siete meses del sismo y se habló precisamente repartición de recursos para la reconstrucción.
En menos de un mes, Amador Zamora presentó dos veces la renuncia, ahora si ya se la tomaron, prácticamente estaba solo; por el momento el jefe de gobierno dejó como encargado de despacho al Tesorero, Emilio Barriga.
En Finanzas quien ha extendido su poder es Miguel Ángel Vásquez, quien fue el primero en levantar la mano para suceder a Edgar Amador, quien sabe si Emilio Barriga tenga el estómago y el ánimo para aguantar la presión que se viene.