Más allá de los candidatos, es conveniente figurarnos qué pasará en las siguientes semanas y meses después de la elección si gana cada uno de ellos.
Me voy a ocupar sólo de los tres candidatos que tienen posibilidades de ganar. Hasta ahora el debate se ha centrado básicamente en la corrupción, la amnistía a los narcotraficantes, el nuevo aeropuerto y el avión presidencial y poco se han discutido otros temas más impotantes para el desarrollo del país.
En cuanto al combate a la co- rrupción hay un compromiso claro de los tres, la diferencia está en que Anaya tiene un discurso más persecutorio, Obrador ha hablado de amnistías y Meade la combatirá, pero seguramente su prioridad no será la persecución sino la creación del marco jurídico para eliminarla.
En el caso de la inseguridad también las propuestas son muy similares: profesionalizar a las policías, crear el mando único y dar un marco jurídico al Ejército y la Marina mientras sigan en las calles y los tres hablan de combatir la im- punidad y fortalecer los ministerios públicos.
López Obrador propone una Guardia Nacional desapare- ciendo al Ejército y la Marina. Tanto Anaya como Meade representan una apuesta hacia el futuro con una economía abierta y liberal, mientras que AMLO significa un regreso al nacionalismo con un estado empresario y rector de la economía.
Los dos primeros avanzarían en las reformas estructurales, mientras que el de Morena lo más seguro que revertiría la energética, la educativa y la laboral.
En cuanto al salario mínimo los tres se han comprometido a aumentarlo, Obrador en 15.6% más inflación cada año, Anaya a 100 pesos en diciembre de este año y Meade se ha comprometido, pero no ha dicho cuánto ni cuándo.
Todos se comprometen a un crecimiento económico más acele- rado sin decir cómo lo lograrán, así mismo se comprometen con man- tener la estabilidad financiera y el equilibrio de las finanzas públicas.
Lo anterior suena bien, pero si Anaya cumple su propuesta de un ingreso básico universal tendría que recurrir a fuertes déficits para financiarlo, lo mismo que AMLO con sus promesas de apoyo a los jóvenes y adultos mayores, Meade ha hablado de un programa de a cada uno según sus necesidades, pero no lo ha cuantificado y no re- presentaría una amenaza para las finanzas.
Todos se comprometen a combatir la pobreza, Meade y Anaya a través del crecimiento económico y del empleo y una política social complementaria y López Obrador a través de gasto social.
Si gana Obrador veremos un gobierno más presidencialista, más preocupado con la igualdad y convocando a movilizaciones populares, si gana Anaya un gobierno de coalición, que ojalá no sea de colisión, entre PAN, PRD y MC, y si gana Meade un gobierno más descentralizado, con más peso de los gobernadores y por lo tanto probablemente más democrático.
Tratando de resumir, AMLO es el que más apoyo político tendría, el que más cambios haría y el que más inestabilidad provocaría, Meade es el más capacitado y el que garantiza la continuidad económica, pero se ve lejano a la gente y Anaya es un hombre inteligente, sin experiencia y es una verdadera incógnita cómo y con quién gobernaría
Miércoles 4 de Diciembre de 2024