Adriana Moreno Cordero: La retaguardia

El gran perdedor del debate presidencial, sin duda, fue el candidato de Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador, y ese hecho incide de manera directa en la Ciudad de México, concretamente en la abanderada de Morena, Claudia Sheinbaum, que durante toda su vida política se ha “montado” en la figura del tabasqueño, en un perverso juego de “lo que hace la mano, hace la tras”. López Obrador asegura que sus malos resultados en el debate no le quitarán ni un solo voto, pero esa aseveración se ha puesto ya en tela de juicio, y en el caso de Sheinbaum, los analistas pronostican que se verá seriamente afectada, pues al igual que el de Macuspana, ni le gusta debatir y supone que ganará solo por la marca AMLO. Sin embargo, la realidad rebasa a Morena en la capital de la República, y como muestra está que la candidata de la coalición Por la CDMX al Frente, Alejandra Barrales, consolida su campaña con la incorporación de cuadros de Morena que han sido marginados. Ahí está el caso de los hermanos Jesús e Isaho Briones Monzón, que tomaron la decisión de apoyar a Barrales, decepcionados de la actuación de Pablo Moctezuma como delegado en Azcapotzalco. En estos días, Jesús Briones se separará oficialmente de la bancada de Morena en la ALDF para declararse diputado independiente, mientras que a Isaho Briones, Raúl Flores, dirigente del PRD en la CDMX, lo nombró delegado del partido del sol azteca en Azcapotzalco. Por cierto, en el anuncio que hicieran los hermanos Briones, estuvo presente el ex delegado en Gustavo A. Madero, Víctor Hugo Lobo; de ahí que se comentara que  mucho tuvo que ver en la adhesión de los Briones a la campaña de Barrales, la mano del dirigente de Fuerza Democrática, la corriente hegemónica del sol azteca en Azcapotzalco y Gustavo A. Madero. Habrá, en estos días, más migraciones de Morena al PRD en la Ciudad de México, así que Sheinbaum debería estar muy preocupada.