Sálvese quien pueda

Este domingo se realiza el primer debate entre los candidatos a la Presidencia y eso ha desatado una cascada de especulaciones que habla de acuerdos inimaginables entre candidatos, las cúpulas de los partidos, gobernadores y hasta con el gobierno federal. En el círculo rojo, en restaurantes, pasillos del Congreso y los cuartos de guerra de los aspirantes, corren múltiples y variadas “teorías”. Unas mencionan presuntas alianzas con el puntero de las encuestas, otras para evitar que gane la Presidencia, unas más para sacar a Ricardo Anaya de la jugada y algunas que mencionan crisis en el equipo de José Antonio Meade. En ese abanico de especulaciones, se plantea que habría un acuerdo entre el PRI y la coalición Por México al Frente para frenar el crecimiento de Andrés Manuel López Obrador. Esa, dicen, habría sido la razón por la que “dejaron” de golpear a Ricardo Anaya, sobre todo porque las acusaciones que lo involucraron con posible lavado de dinero lo único que hicieron fue beneficiar al tabasqueño y frenar el crecimiento de Meade. Sobre el tema, uno de los dirigentes de Por México al Frente me dijo que no hay ninguna alianza y menos porque los agravios entre las partes en conflicto se fueron al extremo. Lo que sí hay es un acuerdo tácito para dejarse de acusar sin sustento. Para bajarle dos rayitas a la estridencia, en pocas palabras. Por otro lado, integrantes de la misma coalición habrían iniciado conversaciones con algunos gobernadores del PRI, quienes se acercaron a ellos para ponerse a sus órdenes, en virtud de que su candidato, José Antonio Meade, no crece en las encuestas. Otra especulación surgió a raíz del enfrentamiento entre Andrés Manuel y el empresario Carlos Slim por la construcción del nuevo aeropuerto. Se llegó a decir que el “pleito” se había creado de común acuerdo para dejar que AMLO se luciera y pasara inadvertida la información que lo involucraba con un presunto fraude. Sin embargo, poco lo creyeron, porque ambos salieron lastimados y a nadie le gusta que lo golpeen públicamente. Pero, hábil como es, quedó la sensación de que el ingeniero puso a prueba al tabasqueño y éste cayó en la provocación, con lo que acumuló un gazapo a unos días del debate. En el caso de José Antonio Meade, se sigue diciendo que prevalece un desorden en su cuarto de guerra lo que no ha permitido que luzca como el hombre preparado que es. Cada vez lo percibe más lejos de López Obrador, lo que ha generado mucho desánimo de los priistas de todo el país. Militantes del tricolor en estados como Oaxaca, Colima y Sinaloa, buscan otras alternativas. En territorio oaxaqueño, priistas de algunos municipios trabajan por Andrés Manuel, y eso fue evidente durante el mitin en el que agredieron a la comitiva del Meade en Puerto Escondido, hace una semana. Varios gobernadores, están en huelgas de brazos caídos. Unos porque no están de acuerdo con la forma en que están llevando la campaña y otros por su incapacidad para operar, como el oaxaqueño Alejandro Murat. Otro tema que ha sido motivo de conversación es el rescate de Jaime Rodríguez El Bronco. Se especuló que el Tribunal Electoral recibió órdenes del gobierno para incorporarlo como candidato independiente, a pesar de las irregularidades en la recolección de firmas para alcanzar su registro. Estos son algunas estampas del ambiente que priva a dos días del primer encuentro cara a cara de los presidenciales. Todo mundo habla y especula. Lo más triste de la realidad es que nadie recuerda una sola propuesta y ya llevamos tres semanas de campañas. *** Y como dice el filósofo… Nomeacuerdo: “Cría cuervos y… tendrás muchos”.