El miércoles 11 de abril, los tres candidatos con mayor aceptación para la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México participaron por primera vez en un debate, éste fue organizado por el periodista Carlos Loret de Mola.
La primera intervención, de presentación, la basaron en lo que ellos mismos quisieron resaltar, puede resumirse de la siguiente forma: Alejandra Barrales: “la candidata con mayor preparación y experiencia”; Claudia Sheinbaum, “la científica y miembro de la academia que quiere gobernar”, y Mikel Arriola, “el candidato de la familia tradicional”.
Carlos Loret de Mola puso en el centro de la discusión el tema de la corrupción, (aquí fue cuando el debate se empezó a poner divertido), Sheinbaum acusó al actual Gobierno de la Ciudad de ser el responsable de regresar la corrupción (como si alguna vez, hubiera sido erradicada); Arriola acusó de corruptos a los gobiernos de izquierda, en particular al jefe delegacional en Tláhuac, al que llamó “narcodelegado”, (la corrupción en este país, no es cuestión de ideología, está asociada a la clase política en general) Barrales, por su parte, señaló la corrupción de los gobiernos delegacionales de Morena y cuestionó la calidad moral del priista para hablar del tema.
Como era de esperarse, el Rébsamen fue utilizado para atacar a la morenista, sin duda, el momento más incómodo del debate; el sismo del 19 de septiembre del año pasado, sigue moviendo las fibras sensibles de la población de la Ciudad de México.
En cada intervención, el candidato del PRI, Mikel Arriola, se veía desesperado por tratar de convencer de que él es quien ocupa el segundo lugar en las encuestas; no tuvo éxito en su encomienda, incluso Claudia Sheinbaum, del partido Morena, resaltó que es ella quien ocupa el primer lugar, seguida de la candidata del Frente, Alejandra Barrales.
En la estrategia priísta es una obsesión tratar de convencer al electorado de que ocupan un mejor lugar. Después de más de 20 minutos de ataques cruzados, los participantes decidieron pasar a las propuestas (¡qué bueno!, se acordaron que la esencia del debate es el intercambio de ideas), y aquí viene lo más rescatable de los 41 minutos con 52 segundos que dura el video del debate consultado por su servidor en YouTube.
En materia de seguridad y combate a la corrupción, Mikel Arriola ofreció meter a la cárcel a los delegados corruptos, en particular a los titulares de Cuauhtémoc y Tláhuac. Claudia Sheinbaum presentó, a su manera, una propuesta en materia de seguridad. Alejandra Barrales ofreció establecer un sistema de monitoreo del transporte público (aunque primero se tiene que seguir invirtiendo en su modernización).
Así las cosas en el primer debate; las propuestas ocuparon un segundo plano. Me quedo con una, por ser concreta y hablar de números, la de Alejandra Barrales para otorgar 2 mil 500 pesos mensuales a un millón de jefas de familia en la Ciudad.
A los ciudadanos nos gustaría conocer más del tema, ojalá en el debate del 18 de abril, organizado por el IECM, las propuestas pesen más que los ataques.