Los cambios reales comienzan en el interior; para innovar o hacer disrupción en el mundo, debemos comenzar por nosotros; por hacer las cosas distintas de una manera positiva.
En esta ocasión quiero hablar de la disrupción personal, lo importante que es estar sanos mental y espiritualmente para proyectarlo hacía los demás; esto es un poco de lo que nos enseña una práctica Hawaiana que habla del perdón y la reconciliación con uno mismo: Ho’oponopono.
Los antiguos hawaianos, creían que los errores de las personas eran las causantes de las enfermedades, así que, para sanar, había que hacerlo internamente o de manera espiritual para ser felices.
“Limpia, borra y encuentra tu propia paz. ¿Dónde? Dentro de ti”, así lo citaba Morrnah Nalamaku Simeona, una sanadora y maestra que se encargó de difundir este arte, pero adaptada a nuestros tiempos, en una práctica más interpersonal.
Ho’oponopono es enmendar, corregir un error, pedir perdón, sanar y proseguir sin ninguna carga emocional, es reconciliarte contigo mediante un mantra: “Lo siento, por favor, perdóname, te amo, gracias”.
Esta práctica se implementó en Hawaii con pacientes criminalmente locos, consiguiendo resultados milagrosos, fueron tratados con amor, como niños, no como criminales; cambiando su forma de pensar y de tratar a los demás.
He tenido la oportunidad de ver cambios increíbles, usando esta tecnología para el alma, para mí, esta y todas las herramientas encaminadas a estar mejor internamente son también una industria 4.0.
Estamos en una era en la que necesitamos renovarnos, encontrar aquellos huecos que no nos permiten avanzar para ser mejores como personas y como sociedad. En la medida que conectamos más con lo básico, con el amor personal y perdonamos, en esa medida seremos capaces de sumar en esta trasformación universal.
Te invito a repetir el mantra: “Lo siento, por favor, perdóname, te amo, gracias”.
108 veces durante 21 días.
Lo siento, perdón, gracias, te amo.
Marisol Rumayor