El lunes pasado publiqué en mi columna sobre un pleito que hubo en un departamento en el St. Regis, después de un concierto de Alejandro Fernández en la Ciudad de México (un after party).
Varios programas de radio y televisión me retomaron, así como algunos medios impresos. Decidí investigar más de lo que sucedió para platicarles.
Resulta que una niña, más bien ya adulta, estuvo grabando con su celular lo que sucedía en la fiesta.
Recordemos que en estos eventos hay alcohol y ligues, por lo que muchas veces no les gusta que quede documentado en un teléfono ajeno que más tarde pudieran evidenciar cosas privadas o vendidas a alguna revista.
A la señorita de nombre Violeta se le pidió que no grabara, cosa que ignoró y siguió haciendo. Uno de los presentes agarró su móvil y lo aventó por la ventana. Un amigo de la que insistía en grabar se enojó y comenzó el pleito.
Al final de cuentas, si te piden que no grabes, pues dejas de hacerlo y punto, más si estás en algo muy privado y con la presencia de uno de los cantantes más importantes de México y América Latina.
Después de todo esto, me entero de que la dama ha buscado por medio de intermediarios vender su versión. Incluso ya se acercaron con gente de la producción de Hoy para negociar.
Sin embargo, el programa matutino más importante se negó a comprar la información o pagarle algo a cambio de una entrevista. Dudo que haya querido grabar con alguna mala intención, pero como les dije, muchas veces la mezcla de bebidas embriagantes, mujeres y adrenalina son una bomba de tiempo que terminan en puñetazos.
A mí si me piden que no grabe algo en petit comité pues me evito problemas y tan tan. Cabe mencionar que al día siguiente de publicar la columna, me habló Violeta a mi celular (no sé quién se lo pasó) para preguntarme sobre mi fuente, cosa que le negué pues en este medio la fuente es sagrada y hay que respetar a las personas que muchas veces nos prevén de información privilegiada que con gusto les compartimos a los lectores para mantenerlos informados.
Cambiando de tema, esta semana hubo rumores de que Televisa regresará con un nuevo programa de espectáculos.
El nombre que suena para conducir el proyecto es ni más ni menos que Atala Sarmiento. La conductora de TV Azteca que ha negado su visita a Televisa como si fuera un delito.
Me parece un gran acierto que la televisora de San Ángel haga algo para competir directamente con Ventaneando, pues han perdido terreno en esa área.
Me gustaría mucho que de ser cierto, el productor sea Reynaldo López, pues el señor es muy bueno haciendo programas de chismes y tiene una forma de pensar joven y de hacer muy buen equipo.