El martes tuve la oportunidad de visitar Tla?- huac, delegacio?n de la Ciudad de Me?xico que refleja una realidad para nuestras ciudades.
A veces, cuando pensamos en condiciones de pobreza, nos imaginamos comunidades rurales que no cuentan con servicios ba?sicos o que carecen de hospitales y cli?nicas.
Sin embargo, en la actualidad no cabe duda que la pobreza urbana puede llegar a ser la ma?s grave; ante desarrollos de infraestructura, proyectos inmobiliarios y un sector servicios que crece aceleradamente en muchas delegaciones capitalinas; en otras, la realidad es distinta: hace falta una visio?n que empareje condiciones de acceso a servicios ba?sicos.
Adicionalmente, los sismos de septiembre demostraron la desigualad que existe, por ejemplo, entre delegaciones como la Benito Jua?rez o la Cuauhte?moc, con Xochimilco o el mismo Tla?huac.
Diversas fugas de agua, cortes a la electricidad y las condiciones de las viviendas en general pusieron en relieve que no todos los capitalinos ejercen sus derechos sociales de la misma manera.
Ante la contingencia, resulto? fundamental el acuerdo que establecio? el gobierno del presidente Pen?a Nieto para redireccionar recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) hacia acciones de vivienda.
En este sentido, lo que se esta? haciendo con el FAIS no solamente en la ciudad, sino en todo el pai?s, esta? funcionando para reducir i?ndices de carencias relacionadas a servicios ba?sicos y calidad de las viviendas.
Tan so?lo para 2018, los recursos provenientes del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social para la Ciudad de Me?xico superara?n los mil millones de pesos, con un incremento de 10 por ciento respecto a 2017, cuando 84 por ciento de los proyectos se realizaron precisamente para mejorar los espacios y servicios de viviendas de la capital del pai?s.
Ciertamente, el reto de la ciudad va ma?s alla? de infraestructura y servicios.
Resulta vital que en una de las 10 urbes ma?s importantes del planeta, ninguna nin?a o nin?o se quede sin ir a la escuela o sin servicios me?dicos.
Por eso, la expansio?n de Prospera en la capital ha sido fundamental; llega a una de cada cuatro personas en situacio?n de pobreza, con una inversio?n que supera los cinco mil millones de pesos en la actual administracio?n federal.
Si queremos que la Ciudad de Me?xico mantenga su papel como motor del crecimiento nacional, debemos garantizar que todas y todos ejerzan sus derechos.
Esto implica consolidar poli?ticas pu?blicas incluyentes y que incorporan el poder que tiene la participacio?n para impulsar desde el interior el desarrollo comunitario.
De eso se trata nuestra poli?tica social de Estado: la construccio?n del Me?xico que todos deseamos no deja ni dejara? a nadie atra?s.
JAVIER GARCI?A BEJOS
SUBSECRETARIO DE PLANEACIO?N DE SEDESOL
@ JGARCIABEJOS