Uno de los mecanismos que más deberán utilizar los gobiernos locales y municipales hacia el futuro es el de las Asociaciones Público-Privadas (APP). Muchos alcaldes y gobernadores ignoran el alcance de la nueva ley, que facilita que la inversión privada se sume a los proyectos de infraestructura pública. Pero quienes ya lo vieron lo están aprovechando.
Un vehículo que recientemente fue puesto en el mercado bursátil fue un CKD (Certificado de Capital de Desarrollo) creado por la firma Fondo Capital Infraestructura que encabeza Eduardo Santoyo, quien se alió a Grupo Financiero Interacciones para lanzar el verano pasado lo que podría calificarse quizá como el más completo vehículo financiero para el desarrollo de proyectos de tamaño medio y bajo riesgo comercial, usando la figura de las APPs.
El corte de caja de este CKD a marzo de 2018 es sumamente positivo. La colocación en el mercado el verano pasado fue por 3 mil 500 millones de pesos, y a la fecha hay varios proyectos que ha promovido: uno denominado TRS Recycling, especializado en tratamiento de residuos sólidos en Cancún y en Querétaro; y dos hospitales (desde su concepción hasta su operación) del IMSS, uno en Nuevo León y otro en Tepotzotlán, cada uno con 260 camas.
Los CKDs son un vehículo poderoso que permite que un administrador financiero con experiencia levante dinero en el mercado bursátil —entre inversionistas dispersos ávidos de rendimiento; es decir, cualquier mexicano—, y promueva proyectos de infraestructura de largo plazo. De tal suerte, el CKD de Santoyo apareció como una novedad fresca y exitosa en el mercado bursátil, dadas las condiciones con las que opera: (1) Estableció límites de hasta $ 700 millones de pesos máximo por cada proyecto de inversión; (2) Invierte el proyectos de flujo predecible; (3) Cuenta como contrapartes a los gobiernos federal, estatales y municipal, lo que reduce los riesgos, (4) Cuenta con doble análisis para cada proyecto, el de la empresa de Santoyo y el de Interacciones; y (5) busca rendimientos que van desde el 12 por ciento hasta el 16 por ciento.
Por su éxito, ya especula que en algún plazo razonable podría emitirse un segundo CKD. Eso ya se verá…