Campañas negras

La existencia de guerras sucias en los procesos electorales no debe escandalizar a nadie, pues las campañas negras forman parte del arsenal que los políticos utilizan cuando no han logrado posicionarse positivamente en el ánimo del electorado. De manera pues que si el candidato a la presidencia de la República que va “hasta la cola” no consigue atraerse la simpatía y el apoyo de la ciudadanía con una campaña de propuestas, de ideas, de compromisos, y su oferta política, así como su imagen y lo que representa es menospreciada por el electorado, seguiremos siendo testigos de un penoso espectáculo lleno de filtraciones, grabaciones ilegales de audio y video, rumores, historias comprometedoras y maledicencias sin fin: No importa si se trata de mentiras o si existe fondo de verdad en las acusaciones que se hagan a los adversarios. La regla en la campaña será: “Calumnia, que algo queda.”  ¿Cuál será la norma ética para que las reglas del juego en las campañas electorales de 2018 respeten los límites de la legalidad, sin sacrificar la dureza y hasta la rudeza de los ataques legítimos entre candidatos? Preguntan los analistas bisoños. La ética no existe, responden los observadores políticos objetivos e imparciales, por lo que seguiremos viendo cómo los candidatos de todos los partidos políticos se arrojan bolas de inmundicia. Y el partido que siga fracasando en el intento de posicionar rápidamente a su candidato presidencial para que alcance porcentajes altos de intención de voto, acudirá recurrentemente al recurso de montar una campaña negativa en contra de sus  adversarios que ya están bien situados. Así las cosas, nadie deberá escandalizarse si los lemas, discursos y spots electrónicos de los partidos políticos contienen mensajes que denuncien conductas públicas ilegales o censurables de los candidatos. Lo que cualquiera esperaría es que ahora que ya sonó la hora de los lodazales, los que han decidido caminar en los pantanos sepan cómo hacerlo, porque no cabe el trillado argumento de “que hay aves que cruzan el pantano y no se mancha su plumaje”. AGENDA PREVIA La senadora del PRI  Lisbeth Hernández Lecona presentó un decreto para adicionar la Ley General de Educación y la Ley General de Infraestructura Física y Educativa, en materia de comedores, cuyo propósito es combatir el hambre y fomentar la nutrición sana para las y los niños estudiantes de nuestro país; es importante establecer en las leyes que el asistir a la escuela y alimentarse adecuadamente es parte fundamental para que los menores se desarrollen y mejoren su ámbito personal, bienestar familiar y social. Es importante legislar para poner fin al hambre, lograr una calidad alimentaria, mejorar la nutrición y promover entre nuestros niños una agricultura sostenible para el año 2030, subrayó la senadora. La encuesta de Parametría ubica a Mikel Arriola, candidato del PRI al gobierno de la “City”, con 22 puntos y a 6 de la “señito” Alejandra Barrales; Claudia Sheinbaum baja a 36. La tendencia al alza alienta al pelotari y, según sus estrategas, hay inquietud en los cuarteles de la candidata del Frente y de Morena.