Desde el sábado empezaron las manifestaciones por falta de agua en diversas colonias de la Ciudad de México y se multiplicaron al inicio de semana, en algunos casos la autoridad capitalina optó por enviar granaderos para romper y disolver el malestar ciudadano que sólo reclama un derecho.
Durante los últimos 30 años se ha dicho que la red de agua potable es vieja, insuficiente y está tan fracturada que por ahí se pierde el 40 por ciento del suministro en la ciudad. Este no es un problema nuevo, pero no hay una política de Estado real en todo este tiempo.
El futuro de cualquier ciudad o país depende el agua. Ramón Aguirre, director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, ha hecho un análisis de la situación y de los requerimientos anuales mínimos que se necesitan para mejorar la red, obviamente no se han atendido y el problema sólo se administra, no hay acciones reales concretas hacia la solución.
En noviembre el año pasado la Asamblea Legislativa del Distrito Federal aprobó una Ley de Sustentabilidad Hídrica que en el artículo 6, estable que las autoridades deben garantizar el abasto a través de carros tanques, o sea pipas o garrafones, pero eso depende de los criterios que establezca el Sistema de Aguas. Esa es la solución de los diputados.
Ese artículo era ofensivo para la población que vive en zonas donde siempre falta el agua o llega tan sucia que es imposible utilizarla como en Iztapalapa; pero el problema se detonó en varias delegaciones el fin de semana, la gente bloqueo el Eje 3 Oriente a la altura del Metro Coyuya uno de los reclamos era que no querían pipas, sino que resolvieran de una vez por todas el abasto de agua. Mandaron granaderos para liberar la vialidad, ojalá que los diputados hubieran estado presentes.
Habitantes de las colonias de Peñón de los Baños y Pensador Mexicano bloquearon este lunes el Circuito Interior rumbo al aeropuerto para reclamar el servicio de agua, otra vez granaderos y hubo enfrentamientos. Los cierres de vialidades se multiplicaron en en Benito Juárez en el cruce de Eje Central y Obrero Mundial; así como en San Antonio y Nellie Campobello en la delegación Álvaro Obregón; en el Eje 3 Oriente y Atanasio G Sarabi en Iztapalapa.
Los habitantes de Unidad Demet San Antonio desde hace tres semanas no tienen agua, las autoridades no escuchan, pero eso si continúan autorizando más desarrollos inmobiliarios que en los últimos cuatro años son imparables en esta zona de Álvaro Obregón.
Es un reclamo justo de un derecho a las autoridades de la ciudad, pero es tan grande la insensibilidad y falta de responsabilidad social de las autoridades, que la Consejería Jurídica regresó a la ALDF el 26 de enero la Ley de Sustentabilidad Hídrica no para garantizar el derecho al agua de la gente, sino para clarificar el mecanismo de cobro y sanciones.