En el anteproyecto de Presupuesto de Egresos para el siguiente año no aparece la clave S248 o subsidio 248. Fue borrada, lo que significa que no habrá dinero para los programas y proyectos de inversión que otorgaba la Secretaría de Turismo (Sectur) a través del Programa de Desarrollo Regional Turístico Sustentable y Pueblos Mágicos (Prodermágico).
Con 585 millones 986 mil pesos que se presupuestaron para el Prodermágico, en este 2018, se pudo financiar –en colaboración con los gobiernos de los estados y municipios– los Centros de Convenciones de Aguascalientes y Coahuila, el Museo Leonora Carrington, de la Huasteca Potosina, el mejoramiento urbano en los Pueblos Mágicos o el Acuario de Mazatlán –que, la semana pasada, le liberaron 400 millones de pesos prometidos– entre varias obras, por poner algunos ejemplos.
La asociación de presidentes de Pueblos Mágicos está enterada de la desaparición del Prodermágico y se muestran consternados, me cuentan algunos diputados, secretarios de Turismo y gobernadores que llegan a la Cámara a cabildear por presupuesto para las obras prometidas. Todo es desconcierto. ¿Cuál será el destino de los Centros de Atención y Protección a Turistas (Capta)?
Estas oficinas se encargan de brindar seguridad y asistencia en lugares como Acapulco, Los Cabos o Querétaro.
Su operación y construcción depende del financiamiento de Prodermágico.
El mismo panorama se vislumbra para pueblos y ciudades con el oficio para recibir visitantes; antes llegaban a la Sectur, en Masaryk 172, en la CDMX, para solicitar fondos que les permitan mejorar la infraestructura, el equipamiento turístico, quizá financiamiento para crear nuevas rutas y circuitos que originaran diferentes productos turísticos, o tal vez ayuda económica que les permitieran estudios, diagnósticos e investigaciones sobre sus lugares para tomar mejores decisiones. Ahora tendrán que ir a la siguiente ventanilla.
Viene una reconversión del tema turístico, no serán los mismos procesos que seguían hasta hoy. La Secretaría de Turismo (Sectur) –por lo que se vislumbra– será el canal especializado para analizar cada una de las solicitudes, le buscará valores: que sea viable, sustentable social y económicamente, obvio que atraiga al turista, etcétera.
Una vez que cumpla con los requisitos técnicos, se pasará a la súper Secretaría de Hacienda, de Carlos Urzúa, para autorización de presupuesto. Ese, al parecer, será el trámite; quienes “ya se sabían el caminito” de Prodermágico, tendrán que “redireccionar su ruta” ante la desaparición inminente de este programa de la Secretaría de Turismo.
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