No hemos alcanzado a dimensionar la gran odisea respecto al nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), mismo que tiene la denominación temporal de Acuerdo México-Estados Unidos-Canadá (AMEC), por ello es importante el panorama de cómo nos encontrábamos antes de las elecciones en EU.
En los primeros días de noviembre, Donald Trump tenía 28.6% de posibilidades de ganar la Presidencia, frente a un 71.4% de Hillary Clinton. Para México, este contexto producía incertidumbre. El día de la jornada electoral en EU, el tipo de cambio spot tuvo un valor de 18.32 pesos. A la mañana siguiente, tras confirmarse la victoria de Trump, el tipo de cambio se ubicaba en 20.85 pesos.
El 26 de abril de 2017, trascendió que el ya presidente Trump presentaría una orden ejecutiva para denunciar -término técnico para salirse de un tratado internacional- el TLCAN, tras lo cual el valor del dólar pasó de 18.86 a 19.19 pesos. Al día siguiente, un tuit de Trump diciendo que EU no saldría del TLCAN bajó el tipo de cambio a 19.03 pesos. Esta volatilidad, reflejo de la incertidumbre de los mercados ante contextos determinados, es el contexto más complicado para hacer planeación económica y concretar negocios e inversiones.
La primera ronda de negociaciones de un nuevo tratado comercial para América del Norte se llevó a cabo entre el 16 y el 20 de agosto de 2017. Tan sólo siete días después, el presidente estadounidense dijo: “personalmente, no creo que lleguemos a un acuerdo... el TLCAN terminará en algún punto”. Días más tarde tuiteó: “estamos en el proceso de renegociación del TLC (el peor tratado comercial que jamás se haya hecho) con México y Canadá. Ambos han sido muy difíciles, ¿deberíamos terminar?”.
Estas declaraciones volvieron a modificar el tipo de cambio perjudicando a la moneda mexicana al pasar de 17.47 pesos que había alcanzado tras la publicación de objetivos para la renegociación por parte de Robert Lighthizer, Representante Comercial de EU, a 18 pesos por dólar.
¿Por qué tanta referencia a la variación del tipo de cambio? Considero que refleja el mundo de inestabilidad en el que hemos vivido por casi dos años como resultado del choque particular de la nueva relación con EU. Lo que han conseguido los secretarios Ildefonso Guajardo y Luis Videgaray, así como sus respectivos equipos de trabajo, es certidumbre a base de negociación permanente y apertura de una multiplicidad de canales de comunicación, experiencia, conocimiento, pericia y audacia, pero sobre todo de un gran patriotismo. Los empresarios e inversionistas saben que hay un nuevo acuerdo para la continuidad de nuestra relación comercial más importante.
La certidumbre importa porque repercute directamente en la inversión, y por ende en la generación de empleos. Sin inversión no hay empleos, y sin ellos, la prosperidad y el desarrollo salen por la ventana.
VANESSA RUBIO
SENADORA DE LA REPÚBLICA
@VRUBIOMARQUEZ