¿Arancel por arancel?

Gabriel Quadri propuso, vía Twitter, esto: “México debe responder al proteccionismo de Trump (aranceles a lavadoras y módulos solares) estableciendo aranceles a la importación de productos agrícolas norteamericanos...”, propuesta que es, ¡precisamente!, lo que el gobierno mexicano no debe hacer. Al proteccionismo no debe responderse con proteccionismo. ¿Qué hizo Trump? Imponer un arancel del 30 por ciento a la importación de paneles solares, y del 20 a lavadoras para el hogar, lo cual afectará principalmente a exportadores de China y Corea del Sur, pero también de México, afectación a la cual, según Quadri, el gobierno mexicano debe responder imponiendo un arancel a las importaciones de productos agrícolas estadounidenses, lo cual reduciría el nivel de bienestar de los consumidores mexicanos, ya que el arancel, que es el impuesto con el que se gravan las importaciones, puede dar como resultado un mayor precio del producto importado, y la relación es clara: a mayor precio menor bienestar. Que el gobierno mexicano aplique medidas que se traduzcan en menor bienestar para los consumidores mexicanos no tiene sentido. Con relación al caso hay que tener presente que, por un lado, está el grupo de exportadores de lavadoras y panales solares hacia los Estados Unidos, entre ellos mexicanos, cuya contraparte es el grupo estadounidense de consumidores de esos productos importados, grupos que comparten el mismo interés: que el gobierno estadounidense permita la importación de esos productos, sin imponer trabas que eleven su precio, como sucede con los aranceles. Por el otro lado está el grupo de mexicanos que consume productos agrícolas importados desde los Estados Unidos, importaciones que Quadri quiere que el gobierno mexicano grave con aranceles, grupo que tiene como contraparte a los exportadores estadounidenses de frutas y verduras, grupos que tienen el mismo interés: que el gobierno mexicano permita la importación de esos productos sin imponer trabas que aumenten su precio, lo que sucedería si se le hiciera caso a Quadri. El arancel impuesto por Trump perjudica, uno, a los consumidores estadounidenses de lavadoras y paneles solares y, dos, a los exportadores extranjeros de los mismos. El arancel propuesto por Quadri dañaría, uno, a los consumidores mexicanos de productos agrícolas estadounidenses y, dos, a los agricultores estadounidenses exportadores de esos productos. Suponiendo que lo correcto sea (¡que no lo es!) arancel por arancel, ¡la guerra comercial!, la propuesta de Quadri daría como resultado el pago de los justos por el pecador. Los justos: los consumidores mexicanos de productos agrícolas estadounidenses y los agricultores estadounidenses exportadores de los mismos. El pecador: Trump, responsable del arancel a la importación de paneles solares y lavadoras para el hogar. Quadri, ¿tiene razón? POR ARTURO DAMM ARNAL E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx Twitter: @ArturoDammArnal