En la plaza

…se comenta que el gobernador de Chihuahua, Javier Corral, tuvo un cierre redondo en su foro estatal con sabor a política nacional, donde hablaron del Frente Amplio Democrático. Además de reunir a la crema y nata del perredismo y el panismo, incluido el líder histórico Cuauhtémoc Cárdenas, sumó apoyos en redes. En su cuenta de Facebook no faltaron ciudadanos que lo candidatearon a la grande. Con eso de que dicen que la caballada blanquiazul está tan flaca, le vinieron bien esos comentarios espontáneos de sus seguidores rumbo al 2018.   …se habla del silencio cómplice del gobierno del Estado de México, que encabeza el priista Eruviel Ávila. A la ola de feminicidios, ha respondido con el silencio y los funcionarios parecen no inmutarse ante cada nuevo caso. El más reciente, el de la doctora Jessica, se difundió por la campaña en redes sociales emprendida por amigos y familiares, pues la administración estatal, hasta el momento, no se ha pronunciado, pese a ser un caso que lastima no sólo a la comunidad médica, sino a la sociedad en general. ¿Hasta cuándo habrá justicia, señor gobernador?   …se supo que el fiscal de Justicia de Tabasco, Fernando Valenzuela, viajó a Houston. Allá se reunió con funcionarios de la DEA, encuentro en el que estuvieron también dos funcionarias de la PGR. Se comenta que le entregó buenas cuentas a su jefe, el gobernador perredista Arturo Núñez, pues consiguió que EU considere como víctima a la administración tabasqueña y les regresen un porcentaje de lo decomisado a la esposa del ex secretario de Finanzas, José Saiz Pineda, que suma unos 50 millones de dólares entre propiedades y cuentas bancarias.   …se dice que el diputado federal José Carlos Ramírez Marín comenzó mover sus piezas, luego de que en Yucatán han circulado encuestas que ponen en primer lugar al alcalde panista de Mérida, Mauricio Vila Dosal, en las preferencias para la elección para gobernador en 2018. Ramírez Marín ve riesgos por partida doble, pues además del posicionamiento del panista, casi le pisa los talones Pablo Gamboa, hijo del senador priista Emilio Gamboa, quien como diputado federal no ha dudado en señalar que él “no va a pagar los platos rotos de su padre”.   Columna anterior.