Quizá entre quienes agradezcan que el presidente Donald Trump redoble sus amenazas a Corea de Norte, siga en la pose de “macho” y preocupe a medio mundo, esté el senador demócrata Robert Menéndez -Nueva Jersey-, porque restó impacto a la noticia de su inminente juicio.
Por: Patricia Guadalupe*
Menéndez lleva años en lucha contra cargos de corrupción, soborno y fraude, y tras varios retrasos un juez federal fijó el 6 de septiembre para iniciar su juicio. Todo empezó a mediados de la década del 2000, cuando la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) investigó alegatos de que Menéndez usaba su influencia como senador para ayudar a un amigo, el oftalmólogo Salomón Melgen, hoy en espera de sentencia en uno de los mayores casos de fraude contra “Medicare”, el programa gubernamental de cuidado de salud para personas de la tercera edad.
Luego de tres años de investigación, el FBI presentó cargos contra Menéndez por tratar de asistir a Melgen en sus contratos con el gobierno federal, a cambio de fondos de campaña y regalos como vacaciones y viajes en su avión privado.
Fiscales federales también acusan a Menéndez de buscar contratos federales por cientos de millones de dólares para uno de los negocios de Melgen en la República Dominicana.
En abril de este año Melgen fue encontrado culpable de 67 cargos de fraude de Medicare. Según los fiscales, el oftmalmólogo intencionalmente diagnosticó erróneamente a sus pacientes para inflar y falsificar facturas.
Tanto Melgen como Menéndez niegan todos los cargos, dicen que son amigos de muchos años y que las vacaciones, por ejemplo, eran para pasar tiempo con ambas familias y no para influenciar a nadie.
Claro que los fiscales federales piensan otra cosa, y un juez negó a Menéndez la petición de trasladar el juicio de Nueva Jersey a Washington. El senador argumentaba que sería más fácil para todos si las audiencias se celebraran en Washington, porque ahí están sus testigos, pero se cree que más bien buscaba evitar la mala publicidad que le traería un juicio en Nueva Jersey, donde planea buscar la reelección en 2018.
Menéndez argumentó hace poco que la acusación no tenía mérito porque no actuó ilegalmente, según un fallo de la Corte Suprema en el caso del exgobernador de Virginia Bob McDonnell, acusado de más o menos lo mismo que él. Pero la Corte Suprema dijo que en su caso, era un “acto oficial” por un legislador.
Recientemente un juez le dijo que su juicio ocurrirá, pase lo que pase, y dio a sus abogados la opción de pedir el retiro de cargos después de que los fiscales presenten su caso. La decisión sobre si lo que hizo Menéndez fue parte de un “acto oficial” es para la corte, dijo el juez.
Menéndez es el demócrata de mayor rango en el Comité de Asuntos Exteriores, que tiene que ver con los “tuits” del presidente Trump respecto a Corea de Norte y otros asuntos que se podrían presentar de aquí a su regreso de las vacaciones de verano.
*Periodista
"Y mientras más bullicio presidencial, menos publicidad para Menéndez a la hora de presentarse en Corte".
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