Christian von Roerich: Urge modernizar en CDMX la infraestructura hidráulica

La falta de agua en la Ciudad de México ha sido una problemática que nos ha afectado por mucho tiempo. Por ello, para resolver la problemática del desabasto que se vive actualmente, es fundamental invertir en la modernización de la red hidráulica en toda la capital. 

Hoy más del 42 % del agua se pierde en fugas, dato alarmante ya que el sistema hidráulico no ha sido modernizado en muchas zonas desde hace más 50 años.

En Benito Juárez hemos trabajado para atenderlas (se han reparado más de mil fugas), de igual forma se da mantenimiento a la red de drenaje, a la red secundaria de agua potable, la extracción de azolve, y se suministra agua potable en pipas cuando así se requiere. Sin embargo, estos esfuerzos nunca serán suficientes si no se logra un cambio total del sistema.

De manera paralela trabajamos con el Sistema de Aguas de la Ciudad para crear programas a largo plazo con visión que dé sustentabilidad en materia hídrica y que se tome en cuenta a todos los vecinos de Benito Juárez.

Otras opciones para modernizar la infraestructura de las redes hidráulica y de drenaje, entre otros rubros, es utilizar el recurso de los pagos que dan los desarrolladores inmobiliarios por impacto urbano, mitigación y suministro de agua.

Esos recursos ascienden a montos millonarios y deben quedarse en las colonias donde se llevan a cabo estos desarrollos. La población debe ver reflejado una mejoría en su infraestructura urbana, como señala el Código Fiscal. 

Cuando fui secretario de la Comisión de Gestión Integral del Agua en la ALDF, propuse: 

1.     La gestión sustentable, como directriz en el manejo y gestión del recurso natural finito y vital para el desarrollo de la vida humana en lo colectivo, y de viabilidad de CDMX, pensando en las generaciones por venir.

2.     La descentralización de Sistema de Aguas, que es un órgano desconcentrado de la Administración Pública de la Ciudad, es decir, cuenta con autonomía administrativa pero sin personalidad jurídica ni patrimonio propio; no tiene capacidad de gestión y ni autonomía presupuestaria.

3.     Crear la Comisión Técnica de Aguas como nuevo organismo descentralizado, la idea es que se conforme por autoridades, expertos en calidad del agua y su gestión sustentable, así como por organizaciones de la sociedad civil.

4.     Controles, vigilancia y certificación del servicio. Bajo este nuevo esquema descentralizado, se propone una mayor autonomía institucional y el establecimiento de tarifas.

Estas propuestas siguen estancadas y fueron retomadas ante el pleno de la ALDF, por el PAN, sin que hasta el momento se tenga algún avance.

El gran reto para la transformación jurídica que tendrá ciudad será reformar de manera urgente todas las leyes secundarias pendientes en la Constitución que entra en vigor en el 2018, entre las cuales se encuentra la Ley de Aguas y Gestión Sustentable de Recursos Hídricos para garantizar un mejor servicio.

Es muy fácil, el agua no puede ser rehén político, es derecho y obligación de los gobiernos hacerla llegar a toda la ciudadanía, por lo que no podemos permitir que se sigan retrasando la modificación y actualización de la Ley de Aguas. De lo contrario viviremos una sequía sin solución.

*Delegado de Benito Juárez.